OBRA PROPIA

A LAS  MUSAS DIOSAS  DE MIS SUEÑOS

Las noches se deshacen en la madrugada cuando el subconsciente me tira del sueño a la         oscuridad, entonces empieza mi calvario, pensar en ella, en la Musa, la que al final de mis años encontré cruzada en mitad de mis caminos.

Desde muy joven leí poesía, el primero fue Petrarca, de lo oscuro de los tiempos pasé al romántico Bécquer y de ahí a la poesía de la mujer la que inspira cuando las veía en las calles, paseos y jardines fueron las inalcanzables para mis sueños, pues siempre creí que la mujer es la Musa, lo más importante en la vida y que a ella le debe el mundo la vida, el amor, los cariños, los gozos sin sombras y la pasión de amar y ser amado y también el desencanto, el dolor y los recuerdos amargos.

Pasaron los tiempos de mujeres sencillas de hablar, crudas de lenguaje y dominadoras con su belleza, otras, al parecer sin aspavientos de actitudes sumisas y recatadas, pero en el fondo dominador y engreído, pero dentro llevan el crisol donde nacen las vidas, base de la humanidad, pozo de sentimientos, cariño y amor.

Por mi trabajo de viajante recorrí sendas, veredas, anchos caminos, carreteras y a veces autopistas, en todas partes encontré mujeres afables, de miradas penetrantes y gestos corporales insinuantes, otras recatadas, tímidas por fuera y fogosas por dentro. Conocí durante tiempo amigas de corazón con las que se engendra un amor fraternal, compañeras de ideas y a veces sueños imposibles. Alguna vez tuve que apaciguar un deseo, un placer efímero, el que no deja huella, escogí con ellas la amistad íntima por su inteligencia, para mi muy valorada, pues que el sexo es efímero, en cambio preferí sus conocimientos de la vida y sobre todo su sincera amistad.

A las que lean esto deseo que sus días estén llenos de  logros y sus no ches de sueños.

af.

2005

LA IMPORTANCIA DEL EGO

BREVE ANALISIS DE LOS PERSONAJES DE LA NOVELA

“NOS VEMOS ALLÁ ARRIBA”

        El premio “Goncourt” de 2013 del francés Pierre Lemaitre, “Nos vemos allá arriba” trata sobre una guerra: la “Gran guerra”, después llamada, cuando hubo otra de semejante importancia, la “Primera guerra mundial”. Una guerra no se hace sola. Se necesitan, cuanto menos, dos contendientes dispuestos a luchar por algo o por alguien. En una guerra se necesitan personas de distinto sexo, edad, cultura, condición, y se involucran de improviso, cuando los llaman a luchar.

        En esta novela, su autor ha sabido mostrarnos, claramente, las diferencias socio-culturales y de personalidad, entre unos hombres que van a luchar y que pueden morir, de otros que van a ayudar y también de los que van a medrar… Hay que considerar que  Lemaitre en su novela, trata a todos los personajes como si fuesen  protagonistas y todos son muy importantes, haciendo que los personajes principales, tengan un contraste que sirve, en el fondo y, también en la forma, para realzar sus respectivas personalidades y que al tener en su crecimiento y formación diversas influencias familiares, de estatus y entorno, se ha forjado en cada uno de ellos un “ego” muy distinto, tan diferente, que no parecen pertenecer a  la misma especie humana.

         En todos  los seres se da una serie, variopinta, de notas en el carácter, que, a veces, son susceptibles de poderse cambiar y otras por el contrario  cristalizan y se aferran o, más bien, las aferramos a nosotros, conformando nuestro ego, según las influencias externas y de asimilación, que nos hayan afectado o hayamos tenido, sobre todo en los periodos de mayor inmadurez. La autocritica es muy difícil en el ser humano. Solemos observar y criticar actitudes ajenas y todos  ejercemos alguna vez en nuestra vida de juez de otro, no importa si familiar, amigo o extraño.

        Pradelle, es el primer protagonista que quiero presentar. Su egocentrismo es tan llamativo que no podría el autor prescindir de él. Sin él no se concebiría esta novela. Es  el “malo de la película”, capaz de las más crueles atrocidades, que irían contra la naturaleza de cualquier ser humano normal. En él no hay moral, no hay ética, no hay compasión, no hay amor. Su “yo primario” se ha visto transformado   a través de su evolución como persona, en un “solo yo egocéntrico” y, caiga quien caiga, tiene que sobresalir y tiene que ascender, aunque para ello tenga que llevar al patíbulo, a inocentes en el campo de batalla y fuera del mismo. Sabe fingirlo todo, incluso el amor, porque nunca lo ha sentido y traiciona, sin sentimiento de culpa, a quien le ama.

        Un ser con un ego tan patológico, constituye un peligro público. A veces se descubre y castiga, pero el daño que ha hecho es difícil de enmendar y si además, siempre tiene coartadas para echar la culpa a otro cualquiera, máxime si son testigos

de sus fechorías, pues entonces va a por ellos, y como una flecha directa que espera dar en el blanco, ataca sin temer sus enredos, pues parece tener respuestas para todo  con sus reflejos rápidos y oportunos.

        El personaje de Pradelle no tiene disculpa, pero lo justifica Édouard, diciendo de él que es un producto de la guerra. “Sin guerra no habría existido el teniente d’Aulnay-Pradelle”. Asesinar a los suyos  para ascender a capitán ¿quedará impune? ¿Recibirá de la pluma de Lemaitre el castigo que merece…? No habría existido, desde luego, en el ámbito de la guerra, pero en cualquier circunstancia, habría sido temible.

        Tampoco habría quedado Édouard como está, sin una guerra como esta: sin su mandíbula inferior, sin los órganos de la fonación y la masticación y, sobre todo, dependiendo de por vida de su compañero de trincheras Albert Maillard a quien salva por instantes, de una muerte cerebral segura, ya que cuando, fortuitamente, lo presiente dentro del agujero del  obús, abrazado a una cabeza de caballo ya había iniciado parada cardiaca. Esa cabeza de caballo putrefacta, mucho más tarde convertida en máscara, será el punto de apoyo  de Albert, no se separará de ella, le recordará su guerra, su independencia, el terror, su renacer, su deuda, su gratitud…

        Édouard ayuda a Albert y este, ayudará siempre a Édouard. Le seguirá en el Hospital y le administrará las drogas extras para que no sufra esos terribles dolores que le hacen querer terminar… y luchará por la morfina para su amigo hasta dejar medio muerto a su expendedor, paliza que en otra ocasión recibirá, recíprocamente, él, y de modo fortuito, en pago a la suya. Albert cambiará la identidad de Édouard, para que se vea libre de Pradelle y libre de su familia.

        Se harán amigos, y Albert admirará en el otro, su modo realista de dibujar soldados en las trincheras. Édouard ha crecido en una familia acomodada, Albert en una familia muy pobre. Ambos hubieran tenido muy distintas perspectivas de vida, si no hubiera sido por la infame guerra, esta les ha unido, pero tienen distintas visiones. Se han formado de distinto modo, han adquirido su personalidad, según sus connotaciones particulares y son muy distintos en deseos y planes para el futuro.

        Édouard no quiere volver a su familia, renunciando a comodidades, honores y privilegios huyendo de un padre que nunca ha sabido valorar sus cualidades, ni como persona ni como artista. El señor Péricourt, Marcel, solo sabe ver la homosexualidad de su hijo. Esto es el “todo” de Édouard para él y es algo que le desborda… ¡Tanto tiempo esperando un hijo varón y resulta ser homosexual!

No se resigna. Lo ignora y no cuenta con que su hijo sea como una esponja, su alma todo lo percibe y el sentimiento de desprecio, se hace recíproco. Madeleine, su hermana, lo quiere, ríe con él sus gracias, sus metamorfosis, que en realidad no  lo son, ya que son su propia naturaleza, pero el solo pensamiento del padre anula a la dulce y paciente Madeleine.

Marcel Péricourt, sueña con el hijo muerto en las trincheras. Ah!, cuántas cosas se ha perdido al ignorarle. Ahora que no lo tiene no puede de dejar de pensar en él. Albert le ha contado con detalle sus heroicidades, su muerte. Ahora sabe que una sola de sus caricias, hubiera valido más que todas sus empresas y todos sus consejos de administración. ¿Por qué no lo aceptó?, si hasta le parecían brillantes sus dibujos obscenos. ¿Por qué había ido siempre contra-corriente?, ¿por qué no había sido nunca magnánimo, con la verdad de su hijo? Dudaba de que su hijo hubiera muerto como un héroe, pero en el fondo esa duda lo fortalecía. Se daba cuenta de que, él mismo, empezaba a ser una “vieja gloria” sin más merito que su fortuna y poder… Su hijo, ese ser que había despreciado siempre, era un héroe nacional. Uno más que muere por los torpes designios humanos que no pueden ni saben hacer otra cosa que acuñar monedas para autodestruirse y, también, acabar con los demás. ¿Le devolvería la paz el hijo que iba a tener Madeleine?, no, nadie se parecería a Édouard, es más, querría que Madeleine tuviera una niña.

¿Se parecería al trepa de Pradelle?

Desde que lo conoció, había presentido  su maldad y que se casara con su hija fue un accidente que no pudo evitar. Su autosuficiencia y su falta de clase, las había notado hasta sin mirarle. También su deseo de medrar y sabiendo  que su hija era un buen trampolín para ello, lo lamentaba…, habría renunciado a  su poder por la felicidad de su hija. Había cosas que no se podían evitar y no se podían poner “puertas al campo”. Madeleine era quizás, algo pasiva, pero no era tonta: todo iría sucediendo como tenía que ser. Tiempo al tiempo, no quería precipitar acontecimientos.

        Édouard había salido a él en cuanto a emprendedor. No solo sabía dibujar con un híper-realismo impresionante, también su inteligencia pragmática le llevaba a aplicar conocimientos. Se quería vengar del estado. Se quería vengar de todos quienes le habían dejado hecho una auténtica piltrafa física y también, psicológica. Se había sentido estafado y ahora con sus nuevos dibujos y prácticas ideas, le tocaba estafar también a él. Solo no podría, necesitaba a Albert, pero este, había desarrollado su “ego”, hasta el límite –escaso- de sobrevivir. Era bastante, pero no suficiente. Añoraba en principio, a Cécile, que lo había abandonado. Después de aceptarle trabajo al padre de Édouard como  contable, deseaba conquistar a la bella sirviente que le abrió por primera vez la mansión, donde había nacido su único y ahora gran amigo… Un largo  camino por recorrer. 

        Su madre, la señora Millard, es castradora…, no en el sentido literal de la palabra- en sentido sexual-, sino porque, metafóricamente, no deja al hijo ser él mismo. La madre siempre evoca algo mejor para él: “que podía ser”. Si fuese de otro modo, sería más acorde con lo que ella quería. Está constantemente, mutilando su personalidad, en todo lo  que él hace. En Albert Millard, prima el sentimiento. Eso lo

salva. Prima el agradecimiento: Eso le honra, y es por ese agradecimiento, aunque parezca paradójico, que logra ser un ser libre.

Con Pauline, tendría la estabilidad soñada. Había encontrado  el amor de su vida, aunque tendría que pasar tiempo, palizas, más morfina para el amigo  doliente y una estafa a la confianza de Péricourt, su protector, al banco donde le había empleado y desde donde variaba los asientos de los capitales aportados de  los clientes, a su favor y más tarde, una gran estafa, a nivel nacional. Todo por Édouard Péricourt, que detrás de las máscaras de la pequeña Louisse, y después, asombrosamente maravillosas, hechas por él mismo, se sentía seguro y como renacer con la identidad de sus “caretas”.

        Édouard, bien como Jules d’Epremont, como Eugene Lariviére, bien como él mismo, Édouard Pericourt, en sus tres personalidades busca  al padre justo que le ha marcado, no lo ha tenido, pero muere por él. Quiere hacer algo grande por venganza, por descontento, pero también por un padre, que, según ha percibido siempre, nunca lo ha aceptado.

        ¿Es justa su traumática muerte enmascarado? Quizás no, pero así lo ha querido su autor, Pierre Lemaitre, que ha querido aunar la brillantez de un enmascarado, con su drama: su drama, por el padre, por él mismo que con su sensibilidad no pudo resistir los  golpes del “ring” de la vida. Marcel Pericourt, es posible que se mereciera ese abrazo, pero ¿por qué el autor le iba a dar esa licencia o ese honor?

         ¿Se merece ese abrazo Marcel Pericourt? Yo no juzgo…

       

        Por esta novela pasan personajes, que solo rozan con su presencia el argumento, pero que sin embargo, dan una nota diferente, haciendo menos denso y tirante este testimonio, pues cuando asistimos a los acechos libidinosos del alcalde, se distrae algo la tensión del relato, y percibimos y compartimos esa rabia contenida de  lo que ha sido siempre el abuso de ciertos hombres hacia la mujer, más bien, siempre indefensa e impotente, sin respuesta inmediata, a esos acechos.

        El personaje de Merlin, que con su poco aseado aspecto, y de maneras no adecuadas a su puesto en la administración, es sin embargo un personaje digno de estudio, pues en su trabajo, parece que sabe ser íntegro y consigue hacer que el infame Pradelle, tiemble ante sus descubrimientos, aunque eso sí, con disimulo. Tiene un precio…, mal reconocido y mal remunerado ¿sucumbe a la tentación del yerno de Péricourt? ¿Hará Merlin la “vista gorda” y romperá sus tres informes, con las aberrantes irregularidades que la codicia han hecho cometer a Énri d’Aulnay-Pradelle? Piensa  el cuñado de Édouard, que con esta gratificación, se han lavado sus fechorías. Creé que solo Merlín ha sido el descubridor de su falta de ética y responsabilidad.

El trato que da el autor, Pierre Lemaitre,  a Merlin, me parece de una ética que sorprende. Un amor desafortunado, lo arruina moralmente y físicamente, pero no olvida que hay que castigar al corrupto. Tiene en su mano hacerlo y lo hace. Se sale de la “norma”.

        Louisse, tiene la suerte de tener una buena guía en su madre, que sabe el valor de la fidelidad y del dinero que recibe, con tanto cariño, de las ganancias de Édouard y Albert. Con su arte y espontaneidad ha sabido hacerle, a los dos amigos, la vida más fácil. Es una niña que movida por la curiosidad, y después por el afecto, hace que Édouard, se vuelva a sentir bien,  y acompaña, además,  a Albert en su anónimo altruismo.

        Los personajes de la novela están vivos en ella. Los ha hecho vivir un autor que ha querido dejar en relieve, la injusticia y negocio de una guerra, que se repite desde que el hombre habitó la tierra y que va destruyendo a la humanidad y a su entorno, haciendo morir a inocentes y haciéndonos notar la dualidad bueno-malo, pero también la exclusividad, que tienen para la bondad o para la maldad, muchas personas.

        En este análisis, van vertidas algunas opiniones de los compañeros de la tertulia literaria y semanal de  la UPUA y mías personales, así  como las deducciones, creamos que lógicas, y que he creído pertinentes, de los personajes que más me han llamado la atención.

        En realidad, todos  los personajes tienen un valor importante, pero harían interminable mi crítica.

Alicante 16/04/2015

Mª Jesús Ortega Torres

Nuestro compañero FIMIOSKY nos vuelve a sorprender con otra de sus creaciones!!

MIS COSAS

Suele haber gentes que a veces, leen libros, no suelen comentarlos según  hayan digerido lo escrito. A veces no releen un párrafo o averiguan el significado y procedencia de una palabra. La lectura suele ser como los cimientos de un edificio, hay quien los hace con poca base para sostener las ideas que van creciendo gracias a la opinión  en los escritores.

Sé que el tiempo se me agota ando ya en el reflujo de mi vida usando la sinrazón, a veces para andar nuevos caminos. Afortunadamente desde niño aprendí a ver la vida, sobre todo en los años  de las hambrunas, la incivil guerra, la posguerra y la cruel dictadura, pero con la suerte de ser niño y no sentir las penas de los mayores con sus estrecheces y falta de lo más necesario para vivir; los juegos te aíslan del trajín en la vida de los adultos.

Anduve por los suelos, subí a los cielos de la abundancia, pero casi siempre me sentí un gandaya, patee campos de sierras agrestes con duras temperaturas, a los que iba a cazar pajaritos con trampas, a recoger aceitunas, algarrobas, bellotas, castañas y yerbas alimenticias: después anduve por veredas entre grandes matorrales, fui gateando espacios y los caminos de sierra me los aprendí en noches oscuras sin luna, en las que andaba camino de los lagares conocidos ya, siempre con la mortecina luz de las estrellas.

Conforme fui creciendo, no en años, sino en conocimiento de gentes y cosas en sus diferentes formas de vida y pensamientos: cuando dejé las veredas y trochas y empecé a pisar carreteras  sobre cuatro ruedas y con la modernidad, por autopistas, sin embargo de niño solo monté algunas veces en bicicleta prestada por un amiguito hijo de pudiente. Después de tantos años sigo añorando aquel patín---único juguete--- que me hicieron con una tabla, un palo y tres cojinetes desechados de ruedas de viejos coches, con el gocé, seguro que mucho más que los niños de hoy día  que andan mirando las pantallitas y no saben cómo hacen las golondrinas cuando llegaban en primavera, sus nidos o usan el que los vio salir del huevo.

Sí, los libros te enseñan, los estudios también, pero la movida de mi vida   constante en busca del negocio y la charla con personas de diferentes pensamientos y religiones, así como formas de vida y economía, ésa vida me enseñó mucho más  que los libros de texto y las enciclopedias por muy buenas que sean. He aprendido hablando con personas de campo, de pequeños pueblos o aldeas y de viajeros, más que en las clases de

gramática, incluso a veces  me he enterado  de cosas que en ningún libro está escrito, al menos de los que he leído.

He conocido personas con ropas de excelente calidad, carísima, oliendo a dinero y comodidad, pero sin historias que contar por sus vidas monótonas sin haber sufrido avatares con los que vas aprendiendo, gozando de  pequeñas glorias y, a veces desastres.

Eso  ha sido para mí hasta  estos últimos restos de vida, pero gracias a escarbar en los recuerdos suelo gozar constantemente de mi niñez, pubertad y juventud, cimientos que me han hecho ver             que el amor hay que practicarlo, la convivencia en el mundo con sus gentes y, sobre todo que te salga de los adentros, no lo que te digan los medios manipulados por políticos y angurriosos personajes que por dinero están deshaciendo el mundo feliz con el que soñó Huxley.

Sé que no puedo enseñar nada a nadie, y menos a los sapientes que se lo creen, porque nadie es más que nadie como ser humano y ninguno lo sabe, ni  conoce todo lo que hay sobre la tierra que pisamos.

2014 Fimiosky

El Gran FIMIOSKY nos deleita con una de sus obras!!        

GENTES

—-Perdón Señor ¿le molestaría contestar unas preguntas? Soy aficionado al periodismo, solo unas palabras para La Gaceta Literaria, revista fundada por unos enamorados de las letras.

—-Oiga: ¿Lo que diga va a salí en los papeles?

—-Si, pero solo lo leerán unos pocos. También lo colgaremos en la Red.

—-¡Qué me van a colgar en una red! Oiga que se cree Vd. ¡A mi no me cuelga naide!

—-No hombre, es una pagina de Internet.

—-¿Qué es eso, una maquina?

—-Pues si,  ¿no ha oído hablar de los ordenadores? Pues por ahí la gente lee noticias, y se entera de todo.

—-Que barbariá ,lo que alantan las cosas. Mie usted, en mi pueblo hasta hace poco no había ni teléfono.

—-¿Dónde está su pueblo?

—-Pos, en los montes de Toledo, bueno es una aldea junto a los baños de la guarra. ¿Qué quié sabe usted?

—-Pues verá, nos interesaría conocer cómo se vive en su pueblo, si la juventud os respeta y si tenéis los mayores dónde pasar las tardes.

—-Pos le diré que juventud no quéan, s`an dío pá la capital. En el pueblo namás hay faena pál campo y poco, solo en temporá de aceituna y la viña.

—-¿Y el alcalde cómo se porta con los mayores?

—-El alcalde dice, pos mie vosté, anda tó el día tras la cabras ¿cómo va a tené tiempo pá los viejos?
—-Y los hijos, tiene usted hijos.

—-Naturá, tengo dos buenos mozos y una hembra, se jué a serví a Madriz, se ajuntó con uno, tiene ya tres nenes y aparece  por fiestas, trabaja jaciendo haciendas, y el compañero es güeno tambien trabaja y tié hasta coche.

 .

—-¿Le parece que nos veamos otro día y me cuenta cosas de su vida?

—-Si, ¿por qué no? Tengo tó er tiempo der mundo, estoy jorgando, gasto lo poco que me quéa en vagar por el parque, ¿sabe?: si guerve por acá nos vemos, ando siempre a darle gusto al ojo con las zagalas guapas, me gusta verlas andar ¿tiene un cigarro, la parienta no me deja jumar, además tengo pocos cuartos.

—-Tome el paquete, de todas maneras a su edad el tabaco si le hace daño, ya es tarde para quitarse.

Hasta otro día señor…

—-Pedro, me llamo Pedro López Jiménez, jubilado del arado.

EL CURIOSO

Escribidor por afición. FIMIOSKY

                  

 Poema Enviado por Maria Jesus Ortega Torres

NUEVA PRIMAVERA

En mi puerta, dos enamorados se besan.

Toc, toc, toc…

Liban, liban las abejas.

Llaman a mi puerta,

abejas y mariposas.

Mariposas y abejas.

Las flores de colores se han vestido,

para estar bellas.

Hoy los ruiseñores cantarán más.

Los enamorados se amarán,

y, un ciclo fructífero,

volverá a empezar.

Toc, toc, toc…

Liban, y liban las abejas.

Abejas y mariposas.

Mariposas y abejas

Toc, toc, toc…

Alicante 20/03/2015

Mª Jesús Ortega Torres

Cuento Enviado por Maria Jesus Ortega Torres

PESADILLA

        Jimmy estaba consternado: le gustaba el campo y lo mandaban a  la guerra. El campo de batalla, no era lo que él quería; él quería plantar árboles, recoger el trigo, tener a punto su cuadra de caballos y su pequeño rebaño. Había nacido para eso, porque desde pequeño, sus padres le habían enseñado y estaba muy feliz en su campo, ese campo. No el de batalla.

        ¿Qué hacer?, no sabía si antes de ir se iba a pegar un tiro él, porque no creía posible, poder pegárselo a nadie.

        No podía llorar y menos, delante de sus padres. Era hijo único y “a lo peor”, no volvía.

        No podía desertar, lo tacharían de cobarde.

Se preguntaba: ¿Qué?, ¿qué…, qué puedo hacer?

        Jimmy seguía igual de consternado, que cuando había recibido la carta de reclutamiento. Antes de abrirla ya sabía lo que le pedían: Todos los reclutas tenían que formar en siete días. Sus últimos días los tenía que aprovechar al máximo… Pensó en casarse. Sí, su novia se quedaría en su lugar, en su casa, con sus padres. Se les iba un hijo, pero tendrían una hija y… ¿quién sabe? A lo mejor en esos días escribían a la cigüeña y ésta atendía su llamada.

        La historia de amor con Flor, había empezado en el colegio. Tenían la misma edad, iban a la misma clase. A Jimmy desde que  la conoció, le entusiasmaron sus trenzas, que eran tan gruesas como la soga que él utilizaba para sacar agua del pozo, pero parecían más suaves. No tardó mucho en acariciarlas, porque cuando  le dijo a Flor lo bonitas que eran sus trenzas, ella, Flor, después de soltar una sonora carcajada, le dijo “ale, tócalas, no pican, pero no las estires”, y así empezó su historia…, acarició sus rubias trenzas, y mientras lo hacía, se fijó en los hoyuelos que se le hacían a Flor, en las mejillas cuando sonreía. Pasó a sus ojos, que eran azules como los lirios que cultivaba su madre, y se dijo para sí: “Jimmy, ¡te estás enamorando…!”

        Los dos días siguientes a la misiva del ejército, Jimmy los pasó en los preparativos de la boda, al tercer día se casaron, celebrando la boda en la misma granja. Los dulces los prepararon Flor y su madre. El cordero lechal, corrió a cargo de los padres de Jimmy, que tenían un hermoso horno de leña en dónde se cocían unas buenas hogazas.

        Las palabras de amor, las caricias…, condensaron la atmósfera esa noche, en el altillo en donde habían improvisado su nido de amor y llegaron al cielo los susurros, que salían del corazón de los dos enamorados.

En el cuarto día recorrieron con el “todo terreno”, unos viñedos en un pueblo cercano, y Jimmy dejó apalabradas unas cepas,  para al regreso recogerlas.

        Recorrieron en dos días con su rojo “Jeep Wrangler”, bellos lugares, llenos de color y aromas, aunque a Jimmy no se le pudo olvidar la guerra… “Si a nuestro campo no ha llegado, ¿por qué tengo que ir a buscarla yo?”

        Jimmy, ayudado por el dueño de los viñedos, Fran, iba colocando las cepas en el  todo terreno. Flor no perdía el tiempo y cortando alguna rosa, paseaba junto a la esposa de Fran, Emily, por todo aquél fértil terreno lleno de vida.

        Él estaba contento, antes de irse le dejaría a su padre, las cepas trasplantadas, porque como buen campesino conocía que debía hacerlo en el tiempo en que no había savia en los troncos, y, aunque era un marzo soleado, era un buen momento. Con Flor no quería hablar de  su cercana marcha, pero fue ella, en el trayecto de vuelta, la que sacó la conversación…

        Decidieron que el último día irían los tres a despedirlo al lugar del reclutamiento, sus padres y ella y Flor  ayudaría a la madre y no se olvidaría cada día de mandarle una carta al frente. Todo era nuevo para ellos, el matrimonio, la guerra, la separación forzosa… Se miraban y no podían creer que faltara tan poco tiempo para la marcha.

        A la infrascrita, se  le presenta un dilema: ¿Morirá Jimmy en la guerra o bien quedará cojo, manco, impotente o ciego, por una granada del enemigo?

         La  infrascrita, tiene el bolígrafo en su mano y se ha levantado de buen humor. Confiesa, humildemente, que aunque se hubiera levantado con mal humor, no estaría en su mente hacer desaparecer a un buen muchachote, que se acaba de casar con su novia de toda la vida y a  la que para más “INRI”, termina de dejar embarazada…

A ese hijo por nacer, le hará falta su padre…

A esa esposa, recién estrenada como tal, le seguirá haciendo falta su marido.

        ¿Por qué matarlo o dejarlo mutilado?

        ¿Hay algo mejor que una familia bien  avenida esperando un retoño?

Decido que no, no lo hay. Decido que el protagonista, que ha pasado a  llamarse “James”, porque en menos de una semana se ha hecho mayor, tiene derecho a sus coles, sus trigos  su ganado y sobre todo a su esposa y a ese niño o niña, que vendrá… Quito lo de la guerra inmediatamente, y lo dejo en que eso sea una pesadilla del anterior Jimmy, quedando transcrito, para escarmiento de este mundo inmaduro, en el que sus gobernantes, a pesar de haber ganado unas elecciones, y  algunos tener varios títulos universitarios, han cambiado los  soldaditos de plomo por los de carne y hueso y no piensan en las cepas de James, ni en su mujer ni en su bebé… Solo piensan en ellos.

Alicante 13/12/2014

Mª Jesús Ortega Torres

5-1-2015: Nuestra compañera María Verdú nos envía el siguiente poema:

25-12-2014: Nuestra compañera Mª Jesus Ortega nos envía el siguiente trabajo:

CUENTO DE AÑO NUEVO

Yo soy, simplemente, verdad. Soy hijo del tiempo y todos me llaman “Futuro”, y todos, me quieren tener…Todos, todos quieren tener un futuro: “su futuro”, y yo, el futuro, ¿lo voy a preconizar?

No, no quiero hacerlo porque eso sería dejarme sin sorpresa y yo soy, para muchos, un cuento largo porque tengo su principio y su final, muy distante. Para otros soy corto, porque su principio y su final casi se tocan, están muy cercanos, pero para los más soy virtuoso, porque en el término medio, está la virtud, y para éstos, soy mediano de tiempo, ni poco ni mucho… Soy cuento porque soy sorpresivo, y aunque ahora la ciencia puede adelantar muchas cosas sobre mí, no dejo de dar sorpresas inesperadas.

En estas fechas, magos y magas se empeñan en dar a conocer lo que pasará en el año acabado de nacer, yo desde aquí y ya desde mi cercanía, les digo que “turururú…”, se equivocan todos, y si no, tiren ustedes de hemerotecas. Lo que ha pasado y pasa está ahí y no lo que los adivinos y adivinas, del futuro, se atreven a decir de mí, todo son simplemente aproximaciones.

¡Socorro, socorro…! Me están apedreando, no recordaba que por todos los lares de mi entorno, hay adivinos que me están leyendo y es su modo de denunciar que no están de acuerdo.

Sentencio que, apedrear al futuro no es buen sistema de protesta, y más les valiera, construir bien el presente, junto a los otros mortales, para que yo me sintiera mejor, y así, todos quienes se tienen que cobijar, forzosamente, bajo mi manto, también se encuentren mejor. Perder el tiempo en adivinar como seré, sin armónicamente, construir los cimientos del presente, es una tontería.

“Estamos en Tanganillas” decía mi padre Cronos, y para él, Tanganillas era un espacio inseguro y poco fiable, se movía al más leve soplo de Eolo y todos podían saltar por los aires, incluso yo…, por eso vino su hija pequeña al mundo, la “esperanza” y esta proyección del tiempo, es la que debe perdurar, no solo en el nuevo año, sino siempre, sin olvidar el amor, la equidad, el saber, y tantos, tantos otros buenos hijos que ha dado el tiempo. Son los hermanos que no quiero nombrar, quienes me hacen peligrar continuamente a mí, el futuro, y siempre confío en que sean los buenos de esta dualidad asombrosa, quienes venzan y se me permita seguir…, aunque a veces pienso que mis buenos hermanos están dormidos, como aletargados, y no tienen voluntad de despertar. Yo no quisiera que les despertase la “necesidad”, que es otra de mis hermanas, sino que cayeran en la cuenta de que no deben estar ociosos y hacer su actividad continua y así, lograr que año tras año, yo, futuro, pueda haceros sentir…

Torrevieja 25/12/2014

Mª Jesús Ortega Torres

8/12/2014: Nuestro compañero Juan Manuel León nos recomienda lo siguiente:

       Os envío este curioso texto, que yo encuentro muy interesante, porque es claro, conciso y su contenido tiene actualidad desde hace 2500 años.

Es muy poco conocido y ni sus destinatarios, los estudiantes de Medicina, han oido hablar de él.

       Se habla mucho del Juramento Hipocrático,tan académico, tan tópico, tan institucionalizado. Anquilosado, como todas las formulaciones solemnes.

Este es un texto que respira vida. Es corto, pero completo. Es sencillo, pero todas las inteligencias, cada una a su medida, lo pueden aprecoar.

    Si alguno de vosotros tiene un mayor interés, podemos, en privado, comentarlo.

Carta de Esculapio a su hijo

“ ¿QUIERES SER MÉDICO, HIJO MÍO?"

Aspiración es esta de un alma generosa, de un espíritu ávido de ciencia. ¿Deseas que los hombres te tengan por un Dios que alivia sus males y aleja su espanto?.

¿Has pensado bien lo que va a ser de tu vida?; 

Tendrás que renunciar a tu vida privada; mientras la mayoría de los ciudadanos pueden, una vez terminada su tarea, aislarse lejos del infortunio, tu puerta deberá estar abierta a todos. A toda hora del día o de la noche vendrán a tumbar tu descanso, tus placeres, tu meditación. Ya no tendrás horas que dedicarle a tu familia, a los amigos o al estudio. Ya no te pertenecerás. Los pobres acostumbrados a padecer no te llamarán sino en caso de urgencia, pero los ricos te tratarán como su esclavo, encargado de remediar sus excesos, sea por una indigestión o por un catarro.

¿Eras estricto en escoger a tus amigos, buscabas la sociedad con hombres de talento, con artistas, de almas delicadas?.

En adelante no podrás desechar a los fastidiosos o a los escasos de inteligencia, a los despreciables. El malhechor tendrá tanto derecho a tu asistencia como el honrado. Prolongarás la vida de nefastos y el secreto de tu profesión te prohibirá impedir crímenes de los que seas testigo.

¿Tienes fe en tu trabajo para conquistarte una reputación?. 
Ten en cuenta que te juzgarán no por tu ciencia, sino por casualidades del destino, por el corte de tus ropas, por la apariencia de tu casa, por el número de tus criados, por la atención que dediques a las charlas y por los gustos de tu clientela. Los habrá quienes desconfíen de t si no usas barba, si no vienes de Asia, si crees en Dioses, otros si no crees en ellos.

¿Te gusta la sencillez?.

Habrás de adoptar la actitud de un augur. Eres activo, sabes lo que vale el tiempo, no habrás de mostrar fastidio ni impaciencia, tendrás que soportar relatos que arrancan desde el principio de los tiempos para explicar un cólico, ociosos te consultarán solo por el placer de charlar, serás el vertedero de las nimias vanidades.

¿Sientes placer por la verdad?

Ya no podrás decirla. Tendrás que ocultar a algunos la gravedad se su mal, a otros la insignificancia pues les molestaría. Habrás de ocultar secretos que posees, consentir en parecer burlado, ignorante o cómplice.

No cuentes con agradecimiento cuando el enfermo sana, la curación es debida a su robustez, si muere, tu serás el que lo ha matado. Mientras está en peligro, te tratará como a un Dios, te suplica, te promete, te colma de halagos. No bien está en convalecencia, ya le estorbas. Cuando se trata de pagar los cuidados que le has prodigado, ya se enfada y ya te denigra.. Cuanto mas egoístas son los Hombres, mas solicitud exigen.

No cuentes con que este oficio penoso te haga rico,. Te lo he dicho: esto es un sacerdocio. Te compadezco si sientes afán por la belleza; verás lo mas feo y repugnante que hay en la especie humana, todos tus sentidos serán maltratados. Habrás de pegar tu oído contra el sudor de pechos sucios, respirar el olor de nauseabundas viviendas, los perfumes subidos de las cortesanas .palpar tumores, curar llagas verdes de pus, contemplar orines, escudriñar esputos, meter el dedo en muchos sitios.

Cuantas veces un día hermoso, soleado y perfumado, al salir de un banquete te llamarán por un hombre que molestado por dolores de vientre te presentará un bacín nauseabundo diciéndote satisfecho: Gracias a Dios que he tenido la precaución de no tirarlo. Recuerda entonces que habrá de parecerte interesante aquélla deyección hasta la belleza misma de las mujeres, consuelo del hombre se desvanecerá para ti. Las verás por la mañana, desgreñadas y desencajadas desprovistas de bellos colores, olvidando sobre los muebles parte de sus atractivos. Cesaran de ser Diosas para convertirse en pobres seres afligidos por la desgracia. Sentirás por ellas menos deseos que compasión.

Tu oficio será para ti una túnica de Neso. En la calle, en los banquetes, en los teatros en tu misma casa los desconocidos, tus amigos, tus allegados te hablarán de sus males para pedirte un remedio. El mundo te parecerá un vasto Hospital, una asamblea de individuos que se quejan.

Te verás solo en tus tristezas, solo en tus estudios. La conciencia de aliviar males te sostendrá en tus fatigas, pero dudarás si es acertado hacer que sigan viviendo hombres atacados por un mal incurable, niños enfermizos que ninguna probabilidad tienes de ser felices.

Cuando ha costa de mucho esfuerzo hallas logrado que la existencia de algunos se prolongue, vendrá una guerra que lo destruirá todo.

Piénsalo bien mientras estés a tiempo. Pero si indiferente a la ingratitud, si sabiendo que te verás solo entre las fieras humanas, tienes un alma lo bastante estoica para satisfacerse del deber cumplido sin ilusiones, si te juzgas pagado lo bastante con la dicha de una madre, con la cara que sonríe porque ya no padece, con la paz de un moribundo a quien ocultas la llegada de la muerte; Si ansías conocer al hombre, penetrar a todo lo trágico de su destino, entonces , hazte médico, hijo mío.

8/12/2014: Nuestro compañero Juan Manuel León nos recomienda lo siguiente:

        Cuelgo en el blog el texto del Dies irae, dies illa por dos motivos.

        El primero, porque está considerado por los eruditos como el mejor poema en Latín  Medieval. Y ya es  esta una buena razón para que lo conozcamos.

       El segundo, porque ha inspirado  a músicos de gran renombre. Se conocen  más de 2000 versiones musicales de este forma (la última, ya en este siglo 2000), meta inalcanzable para el resto de las composiciones poéticas posteriores que se hicieron famosas.

      El dies irae, dies illa está datado en el siglo trece y no tiene  autor conocido. Su difusión a lo largo de todo este tiempo se debe a que fue incorporado por la Iglesia a los oficios religiosos de difuntos. Pero es indudable que su  supervivencia tiene mucho que ver con el contenido del poema.

Texto original en latín Dies iræ, dies illa, Solvet sæclum in favilla, Teste David cum Sibylla ! Quantus tremor est futurus, quando iudex est venturus, cuncta stricte discussurus ! Tuba mirum spargens sonum per sepulcra regionum, coget omnes ante thronum. Mors stupebit et Natura, cum resurget creatura, iudicanti responsura. Liber scriptus proferetur, in quo totum continetur, unde Mundus iudicetur. Iudex ergo cum sedebit, quidquid latet apparebit, nihil inultum remanebit. Quid sum miser tunc dicturus ? Quem patronum rogaturus, cum vix iustus sit securus ? Rex tremendæ maiestatis, qui salvandos salvas gratis, salva me, fons pietatis. Recordare, Iesu pie, quod sum causa tuæ viæ ; ne me perdas illa die. Quærens me, sedisti lassus, redemisti crucem passus, tantus labor non sit cassus. Iuste Iudex ultionis, donum fac remissionis ante diem rationis. Ingemisco, tamquam reus, culpa rubet vultus meus, supplicanti parce Deus. Qui Mariam absolvisti, et latronem exaudisti, mihi quoque spem dedisti. Preces meæ non sunt dignæ, sed tu bonus fac benigne, ne perenni cremer igne. Inter oves locum præsta, et ab hædis me sequestra, statuens in parte dextra. Confutatis maledictis, flammis acribus addictis, voca me cum benedictis. Oro supplex et acclinis, cor contritum quasi cinis, gere curam mei finis. Lacrimosa dies illa, qua resurget ex favilla iudicandus homo reus. Huic ergo parce, Deus. Pie Iesu Domine, dona eis requiem. Amen.

Traducción Día de la ira, aquel día en que los siglos se reduzcan a cenizas; como testigos el rey David y la Sibila. ¡Cuánto terror habrá en el futuro cuando el juez haya de venir a juzgar todo estrictamente! La trompeta, esparciendo un sonido admirable por los sepulcros de todos los reinos reunirá a todos ante el trono. La muerte y la Naturaleza se asombrarán, cuando resucite la criatura para que responda ante su juez. Aparecerá el libro escrito en que se contiene todo y con el que se juzgará al mundo. Así, cuando el juez se siente lo escondido se mostrará y no habrá nada sin castigo. ¿Qué diré yo entonces, pobre de mí? ¿A qué protector rogaré cuando apenas el justo esté seguro? Rey de tremenda majestad tú que, salvas gratuitamente a los que hay que salvar, sálvame, fuente de piedad. Acuérdate, piadoso Jesús de que soy la causa de tu calvario; no me pierdas en este día. Buscándome, te sentaste agotado me redimiste sufriendo en la cruz no sean vanos tantos trabajos. Justo juez de venganza concédeme el regalo del perdón antes del día del juicio. Grito, como un reo; la culpa enrojece mi rostro. Perdona, Señor, a este suplicante. Tú, que absolviste a Magdalena y escuchaste la súplica del ladrón, me diste a mí también esperanza. Mis plegarias no son dignas, pero tú, al ser bueno, actúa con bondad para que no arda en el fuego eterno. Colócame entre tu rebaño y sepárame de los machos cabríos situándome a tu derecha. Confundidos los malditos arrojados a las llamas voraces hazme llamar entre los benditos. Te lo ruego, suplicante y de rodillas, el corazón acongojado, casi hecho cenizas: hazte cargo de mi destino. Día de lágrimas será aquel renombrado día en que resucitará, del polvo para el juicio, el hombre culpable. A ese, pues, perdónalo, oh Dios. Señor de piedad, Jesús, concédeles el descanso. Amén.

3/12/2014: Comentarios de nuestra compañera Mª Jesús Ortega a la novela Expiación:

“EXPIACIÓN”

(Breve aproximación a fondo y forma)

La novela de Ian McEwan, “EXPIACIÓN”, nos deja el sentimiento, de haber disfrutado de un trabajo de literatura, hecho con oficio, y, como si hubiésemos contemplado una obra de arte, porque además de una construcción muy personal, tiene tal complejidad y pluralidad en su trama, que no permite dejar estacionado el libro, sino que por el contrario, incita a continuar, hasta el final, la historia laberíntica, de una familia y todo lo que acaece en su tiempo y entorno. Considero que está muy bien narrada.

La familia “Tallis”, no es una familia normal, convencional. El seno de la familia, está dirigido por una madre con constantes neuralgias, Emily, y el padre de familia, Jack, guarda una “respetable” distancia, que marcada por sus deberes de alto funcionario de gobierno y una posible “doble vida”, que parece insinuarse, nos parece que se le nombra tan solo para que sepamos que existe…

En la página 179, de la edición de bolsillo, se lee el pensamiento de que “no todas las cosas tenían una causa. Algunas cosas, eran simplemente como eran”, y aunque hay mucho de verdad, tanto en esta intrincada historia, como en la vida de cualquiera, una buena causa suele traer buenos efectos, y lo contrario, lleva a lo contrario…

En la primera parte y también en gran parte de la segunda, de la novela, se manifiesta, creo en demasía, el personaje omnisciente, y parece más un relato que un hervidero de personajes, que podían expresar sus sentimientos y experiencias en primera persona y a los que se les describe en plena ebullición, sobre todo después de unos hechos que van a marcar a todos los miembros de la familia y la van a condicionar en su proceder posterior.

Se describe la violación de Lola (la adolescente agregada, junto con sus traviesos hermanos gemelos, al hogar de los Tallis, a quienes acogen éstos, por el divorcio de sus padres), y se denuncia, por la voz de la más pequeña de la familia, Briony, que se atreve a señalar a un culpable…, también “confunde” una manifestación amorosa, de Cecilia y Robbie, con otra violación.

Tiene la novela la originalidad de introducir, en su tercera y última parte, otra novela, que se inserta en la contada por el novelista McEwan y de la que es autora la hija pequeña de la familia: Briony Tallis, que en su juego adolescente y seguido desde la infancia, de querer escribir y que le permite desarrollar su gran fantasía, nos hace meditar, cómo se puede destrozar el sueño de los otros, por un momento de inconsciencia e irreflexión, de una niña consentida y, al mismo tiempo, la irresponsabilidad de autoridades civiles, judiciales, y casi todos los miembros de la familia, que quieren ver lo que la inconsciente Briony, les cuenta, como válido y veraz, sin verificar que el joven e inteligente Robbie Turner, es o no culpable de los cargos expuestos, por una adolescente de gran imaginación, y, como se ve, de poderosa influencia, ante los carácteres tan dúctiles e inmaduros, de familiares y autoridades, que se van definiendo…

Robbie Turner, va a ser médico. Es brillante en los estudios y es una persona muy sensible y ávido lector, que tiene como autores preferidos a los poetas Housman (“El muchacho de Shorpshire”, “Cuando yo tenía 21”…) y también lee al poeta Auden (“Nana”, “Asilo de ancianos”…) Un pensamiento voluptuoso, de joven adolescente y enamorado, que excede los límites…, al escribirlo en una nota, y enviarla a Cecilia, erróneamente y por un descuido, va a ayudar a que se le considere culpable.

El fondo de la novela, gira en torno a todos los personajes, pero sobre todo al hecho de el sufrimiento producido a una pareja, que ve truncado su iniciado idilio, por la imprudencia, embuste, y fantasía, excesivos, de una niña mimada, que, acaparando la atención de todos, motiva el encarcelamiento de Robbie, y la separación, por tanto, de Cecilia, que acaban de descubrir que se aman y lo que es el amor… Briony va a llevar ese peso, que produce el sufrimiento por la culpa, toda su vida. A autoridades y familiares, les viene bien encontrar un culpable y eligen sin pruebas, como en tantas ocasiones, a un inocente, y el culpable, sin conciencia, mirando y no sintiendo ningún remordimiento de que se lleven al hijo de una “sirviente” de la casa, esposado y como culpable.

--Ésto pesa menos, que ocupar su lugar, que es lo que le hubiera correspondido, con la consiguiente pérdida de prestigio y “boom” noticiable--.

La primera impresión de la primera parte de la novela, son una serie de sensaciones, que cambian a otros sentimientos, cuando el autor, Ian McEwan, nos lleva, en la forma, un poco a saltos, a unas explicaciones, que no imaginábamos… Al continuar la narración, vemos en la última parte, que la pequeña Briony, estaba enamorada de Robbie, y en su mente adolescente y fantasiosa, había idealizado ese amor para sí. No quería, cuando descubre el amor de él, hacia su hermana Cecilia, perderlo para ella, y entra en su inmadura conciencia, el demonio de los celos.

Briony, purgará toda su vida su error, y esa expiación , hará, que en su personalidad, entre la reflexión en todos sus actos y quiera enmendar el daño hecho a su hermana Cecilia, que apoya a Robbie, su amor, y pase a un último plano, ella misma, buscando a Cecilia y a Robbie, sin descanso para poder reivindicar una inocencia que les negó de adolescente y rectificar sus atolondramientos infantiles, tan perniciosos, al confirmar unos hechos de los que no tenía evidencias seguras.

La novela “Expiación”, está muy bien documentada. Hay una galería de personajes, que vamos descubriendo, impecables porque los sabe retratar el autor, muy bien y de manera empática, introduciéndonos en sus sentimientos y todas sus acciones.

La evolución de la familia a través del tiempo real, en el que transcurre la novela, la profesión que las dos hermanas eligen, que es la de Enfermera, y la guerra (la Segunda Guerra Mundial), están muy bien detalladas. Creo que ha hecho un análisis perfecto, en todo lo narrado.

La vocación de enfermera, nacida de una propensión de ayuda al enfermo y a la persona más débil y necesitada, se manifiesta, en las dos hermanas, por sus propios sentimientos y con unas primeras motivaciones, que pueden ser subconscientes, pero que experimentan y sienten en distintas circunstancias. La gratificación, les llegará por haber dado lo mejor de ellas, en esa Segunda Guerra Mundial, que como en todas las guerras, tanta necesidad había de consuelo, ayuda y voluntad para atender y curar a tal multitud de personas heridas, afligidas y maltrechas, y con esas carencias de proximidad, de una palabra de afecto y una mano amiga. La llegada de los heridos al Hospital de Londres, es muy patética, y asombra por su lirismo y realismo.

Tanto Cecilia como Briony, saben la importancia de su trabajo y que no es, este trabajo, solo un oficio, es además, una necesidad natural, por la precisión de cuidados y apoyo hacia los soldados, y demás heridos que causa la guerra y que sin ninguna culpa ni deseos de lucha, se ven abocados a participar, por los errores de quienes las provocan, ordenan y mandan.

“Expiación” nos muestra la descripción de los campos de batalla, durante la ocupación alemana en Francia, con un crudo y patético realismo y la lucha diaria de los soldados, entre ellos, Robbie, quién, como persona inteligente, sabe ponerse a salvo, en los momentos más críticos, con una sola idea fija: poder lograr el sueño de vivir junto a Cecilia, a la que las muchas vicisitudes de la vida, han alejado, siendo esta circunstancia la que ha servido, para amarse más.

Creo que “Expiación”, es una novela que debía de ser leída, por todo el que se precie de ser buen lector y que todos, sin excepción, hubiésemos querido firmar.

Alicante 23/10/2014

Mª Jesús Ortega

22-11-2014.-Poesía enviada por Mª Jesús Ortega:

NUBES

El cielo oscurecido, no deja ver ni un claro,

es, como si enfadado, olvidara su azul.

Las nubes, corren, vuelan… El viento las maneja:

Ellas claman, se quejan: ¿Presienten su morir?

Las nubes se alborotan. ¡Ahí llega una tormenta!

Rugen, se manifiestan, haciéndose notar;

blancas eran ayer, hoy lucen todas negras.

Los pájaros se esconden. El viento silba más.

De pronto se iluminan. Un rayo las provoca…

Asedia, rompe y rasga, con suma rapidez.

Ellas lanzan un grito y a tierra su descarga

¡Al límite han llegado…! Que es el fenecer.

No hay nubes en el cielo.

El rayo ya no acude, pues sabe que no están.

La tormenta ha pasado…,

el viento se ha escapado, deprisa a otro lugar.

La percusión del agua, acogida con gozo,

nos deja un cielo claro, transparente y azul,

que se ha abierto de nuevo, proyectando su luz.

Al agua la contienen los ríos y los mares.

A los campos y fauna, hace sobrevivir,

y también a nosotros, pues la necesitamos,

sin ella no podríamos ni crecer ni sentir.

Las nubes, negras, grises…, alimentaron tierras,

a todo lo animado, pasaron su vigor…,

y ahora que se han marchado, por orden del azar,

les hemos dicho: gracias. Les hemos dicho, adiós.

Santurde de Rioja 11/09/2014

Mª Jesús Ortega Torres

25-10-2014.- Novela Policíaca Compartida:

Se inicia el relato compartido de la novela titulada SUSPENSE:

SUSPENSE

(Relato negro)

Una ráfaga de metralla le recibió cuando abrió la puerta de su pequeño apartamento de la calle 33, en la City.

Policía experimentado, y a pesar del chaleco antibalas, el impacto le lanzó al suelo pero con la punta de su pie derecho, alcanzó a cerrar rápidamente la puerta.

¡De buena me he librado!, pensó Adam, esos mafiosos no se saldrán con la suya, y puede que me tengan acorralado, si se han enterado que el piso de arriba se ha quedado sin inquilinos…, igual lo intentan por la chimenea. ¿Se habrán enterado? Llamaré a mi intendente, inmediatamente, para que envíen una patrulla, pero de todos modos, solo sabían mi descubrimiento sobre los “orientales”, mi intendente y mi compañero Fran, ¿cómo se habrá filtrado la información…? No creo que ni Willy ni Fran me hayan traicionado.

Fue al baño. Lo inmediato era mirarse al espejo, resoplar y lavarse la cara con agua muy fría…, tenía que constatar que esto no había sido un sueño y el agua fría le ayudaría a poner en orden su mente. Había sido víctima de un asalto, que, milagrosamente, no fue mortal, pero estaba muy afectado y algo tembloroso, y además, molesto… Marcó el número de la comisaría, el directo con Willy. Le iba dar una buena sorpresa, pero después de explicarle que estaba hablando con él de milagro, tenían que comprobar que en ese despacho no hubiese escuchas. Su jefe le dio la mañana libre…

Son muy ágiles y hábiles los mafiosos, y los sueldos de la “poli” en todos los lugares del mundo, irrisorios si se compara salario-riesgo. Hay demasiado policía con problemas económicos y caen en el delito aunque no quieran.

Ahora necesitaba hablar con “su chica”, lo hacía todos los días pero, especialmente, cuando había atravesado una situación peligrosa. Ella era lo que más quería en el mundo, y aunque vivían en distritos algo distantes, Mary acudía siempre, diligente y enamorada, para acompañarle y atenderle, poniendo en peligro su trabajo y hasta su vida, porque los agresores y enemigos de la ley, nunca olvidan una fisonomía y la de Mary, seguro que la conocían y recordaban.

Contempló la chimenea del hogar largo rato y no halló motivo de preocupación… En su porción interior media, había una rejilla muy tupida y fuerte, que les impediría descender y no se podía arrancar, estaba soldada a los muros laterales a conciencia, ya, más tranquilo, se dispuso a llamar a Mary.

Mª Jesús Ortega Torres: Alicante 22—23/05/2014

NOVELA POLICIACA, SEGUIMIENTO ….

v  Hola cariño ¿Cómo estas?

v  ¡¡¡ Aterrorizada, me ha ocurrido algo espantoso…!!! , al subir al piso 5º de mi oficina se ha colado en mi ascensor un  oriental,  con una voz muy afónica. Me ha amenazado con llenarme la casa de” regalitos”. Con los que dice que puedo quedar peligrosamente sorprendida. A no ser … que  les informe, detalladamente, de todos las conclusiones  que tú tienes sobre su investigación, y que te advierta de que … “cierres el pico”, o la que peor lo pase seré yo…

Al abrirse el ascensor ha salido de estampida. He avisado al guarda de seguridad, ha sido inútil. ¿Tú cómo estas?

v  Bien…, ahora muy preocupado… por ti, son gente peligrosa. Iré a buscarte al terminar tu trabajo … estoy deseando abrazarte.

v  Si, por favor, lo necesito.

Adam, reflexionó…  Esto está tomando un cariz francamente preocupante, han descubierto mi punto flaco y me lo van a poner difícil. Tengo que ver de que manera estrecho el cerco en torno a esos seres sin escrúpulos, capaces de las acciones más abyectas. Ahora debía abandonar el apartamento. Seguramente estarían Observándole desde afuera. ¿Como ingeniárselas  para salir?

Pilar Glez. Noguera 22 de Octubre 2014.

NOVELA POLICIACA, SEGUIMIENTO ….

      Adam caviló, en principio pensó llamar a Willy, enseguida lo descartó prefería hablar con él en un lugar apartado, sin mirones ni cámaras de tráfico. Cogió el móvil de pre pago, desechable que siempre llevaba para que no rastrearan sus llamadas y ser localizado por GPS.

v Willy tenemos que hablar tú y yo solos, sin testigos, así que si te parece en Central Parck me sentaré en un banco en un pasillo que hay lateral al del centro, verás un matorral denso de cañas junto a la laguna

v Allí estaré dentro de una hora—le contestó. 

Tiro el móvil quintándole la tarjeta, el piso estaba en silencio, salió despacio al pasillo, llamó al ascensor y subió hasta el final para entrar a la terraza, sabía que estarían vigilando su portal, cogió el trozo de escalera que va a la terraza, con cuidado abrió la puerta, miró por la rendija; lo que alcazaba su vista estaba vacío, la recorrió toda, pasó por detrás de las chimeneas y en la casilla del ascensor se paró ante la puerta, con cuidado agarró la manivela moviéndola con suavidad y notó como empezó a abrirse, con rapidez sacó de la funda su veretta y la amartilló ya que aquella puerta siempre estaba cerrada, solo tenían llave el administrador y los técnicos de mantenimiento del ascensor. Su instinto le decía que debía estar alerta, receloso de todo, estaba seguro que dentro había alguien y muy preocupado después de haber oído a su amada el miedo que pasó. Estuvo durante unos segundos completamente en tensión y sin pensarlo más abrió la puerta de golpe allí estaba, un tío bajo con gorra y cara de susto con un arma en la mano, con rapidez le apuntó y disparó a quemarropa a la cara de fisonomía asiática, conforme caía le volvió a disparar, quedando tendido sangrando sin soltar la pistola de la mano. No tocó nada, marcó el móvil del teniente y sin preámbulos le dijo ---Fran manda un equipo de sanitarios y especialistas en pruebas a la azotea de mi casa, acabo de cargarme a un asiático, chino o japonés no sé de qué leche es---Oye ¿cómo ha sido eso?----Ven te lo cuento y lo comprobaras personalmente.

Se sentó sobre la barandilla a esperar los equipos, mirando a la calle vio como salían del portal dos individuos con gorra gris muy ligeros cruzaron la calle, se montaron en un Ford gris viejo saliendo a todo trapo, intentó ver la matrícula pero no los distinguió, a los quince minutos oyó las sirenas de los compañeros, llegaron tres coches y con frenazos pararon en doble fila mientras los peatones miraban asombrados aquel revuelo de sirenas y polis. Despacio se fue a la puerta de la terraza, enseguida apareció el teniente, tras él seis polis con sus bolsas, uno, el médico enseguida se arrodilló ante el fiambre, lo auscultó, sentenció su muerte. Mirando a Fram dijo cuándo le hagamos la autopsia ya diremos cosas, llamó con su móvil a los enfermeros de la ambulancia que había llegado ya---Oye Peter subir a por esta basura-

El teniente mirando fijamente a Adam le dijo--- ¿cuéntame por qué lo has matado?--- Con todo detalle y comentarios Adam le contó lo de la amenaza a su novia, la ráfaga de metralleta de la que se salvó de milagro, cosa que ya sabía, pero se lo recalcó, le dijo: --- ¿sabes tú algo?, porque yo ando despistando y no tengo ni puta idea de quien me quiere aniquilar y por qué. Fram arrugó el entrecejo y se encogió de hombros---Yo también ando despistado los porqués de estos intentos de matarte y las amenazas para que calles y cuentes cosas a la banda o mafia que ande detrás.

Sonó su móvil, vio que era Willy que al no verlo a la hora de la cita querría saber que le había pasado, lo apagó sin contestar, no quería que el teniente lo oyera hablar con su compañero. Le preguntó --- ¿porque no has contestado?--- Era Mary, está muy nerviosa y le dije que si me llama y no le contesto es porque estoy trabajando en algo importante y no quiero contarle esto porque se pondría más nerviosa.

Los camilleros pusieron el cadáver en las parihuelas amarrado y se fueron, los técnicos cogieron la pistola todos con guantes, los dos casquillos, también la pistola de Adam. Se bajaron todos dejando solos al teniente con nuestro poli--- ¿Tú que crees Adam, qué puede ser esto, estás escarbando en algo de mafias o narcos? --- ¡No! Fram tu sabes siempre en que ando metido y ahora no hay nada raro, solo aquel tipo que apareció muerto hace unos días y me llamaron a mí los del Sector de Manhattan—bueno ya saldrá lo que sea, tu ten cuidado y a Mary quítala de en medio, si es preciso te la llevas fuera al campo, si tienes algún amigo que tenga alguna finquita lejos de acá te la llevas allí, aquí no puedes dejarla con las amenazas que tiene… 

A. Fimia -Fimiosky

28-09-2014.- Nuestro compañero Antonio Fimia nos envía el siguiente poema:

LETRAS Y PALABRAS

Letras, letras para palabras,

palabras para decirle cosas,

cosas que lleguen hondas,

como semillas en la tierra, y,

en primaveras asomen brotes

y en lo más alto, arriba, no

en los cielos, una rosa perfumada

llena de amor…

Pero palabra tras palabra

nunca llega el mensaje, el

que espera el corazón, por

el que pasa la roja sangre

ardiendo…

Si las letras hechas palabras

se imprimieran, las hojas

llegarían a los cielos azules, y

en las noches de luna su espíritu

leería las ansias y deseos…

a.

18-09-2014.- Nuestro compañero Juan Padilla nos ha enviado el siguiente trabajo:

LA MUSICA Y EL RUIDO:

Debussy y la Gran Guerra 

Cuando a finales del siglo XIX aparece uno de los grandes movimientos artísticos de la Historia, el impresionismo,  Claude Debussy se convierte en uno de sus principales protagonistas. El impresionismo será el lenguaje de lo presentido, de los perfiles vagos, de las pasiones ocultas tras las brumas de los nuevos sonidos, y el 22 de Diciembre de 1894  la noche del estreno del “Preludio a la siesta de un fauno”, basado en un poema de Mallarmée, se convierte en una fecha capital de la historia de la música contemporánea. El músico recompone la orquesta para esta ocasión. Nada de trombones ni trompetas. Ni percusión, por supuesto. Debussy pretende crear una “atmosfera” tenue y vaporosa, en donde el fauno despierte de su modorra y persiga a las ninfas. Efecto que consigue ya desde la primera frase de la flauta, que nos introduce en esa atmósfera densa, sensual, sorprendente para los oídos de la época.

El Arte parece haber encontrado nuevos caminos de expresión de la mano del autor de Peleas y Melisande, y se abrirán puertas a las nuevas vanguardias.

Al final de su vida, Debussy sufrió mucho a causa de un cáncer de recto; pero, moralmente, padecía también a causa de la guerra contra Alemania, cuyo comportamiento le enfurecía.

Alex Ross nos cuenta en su libro “El ruido eterno” la última etapa de la vida de Debussy. En el ofrece algunas noticias sobre su estado de ánimo y de rechazo hacia todo lo germano: “habrá que matar a este microbio de la falsa grandeza, de la fealdad organizada”, escribía a Strawinsky, refiriéndose supuestamente a Ricardo Strauss y a Schoemberg”, añadiendo: “una nueva belleza habrá de llenar el aire cuando enmudezcan los cañones”.

Y no me resisto a transcribir el párrafo final en el que el ruido se erige en protagonista de la historia:

“El 23 de marzo de 1918, la víspera del Domingo de Ramos, los alemanes iniciaron una campaña de terror contra Paris sobre dos flancos diferentes. Los aviones Gotha lanzaron un audaz ataque aéreo a plena luz del día, matando a varias personas en una iglesia. La obra maestra más reciente de Krupp, el Cañón de Paris, empezó a disparar sobre la ciudad a 120 kilómetros de distancia. El ruido inundaba Paris: proyectiles estallando en el aire cada diez o quince minutos; policías tañendo tambores como señales de alerta; campanas de iglesia repicando y trompetas tocando a rebato cuando se acercaban los aviones; reclutas cantando por las calles, escolares entonando la Marsellesa, gente gritando en tono desafiante desde las ventanas “Vive la France ¡”.

“ La muerte de Achille-Claude Debussy, el lunes siguiente, pasó prácticamente inadvertida”.

Juan PADILLA COLOMA

29-08-2014.- Nuestra compañera Mª Jesus Ortega nos envía el siguiente poema acompañado de una fotografía:

LA EXPERIENCIA

No hay día perdido, todos son buenos,

y con espíritu, todos son plenos.

Camino queda, camino avistas, camino habrá…,

¡que el destino asista!

Cada momento es un nuevo intento:

luchar, vivir…, es nuestro alimento.

Se solucionan muchos problemas,

se crean otros: nace la pena.

Con la alegría vamos tirando

y la tristeza se está olvidando.

No hay día perdido, todos son buenos…

Pasamos hoja en el calendario,

no la arrancamos, queda en nosotros:

es la experiencia…

¡La acumulamos y la guardamos!

Santurde de Rioja 29/07/2013

Mª Jesús Ortega Torres

25-07-2014.- Nuestro compañero Antonio Fimia nos envía el siguiente trabajo:

GENTES

Hoy es viernes, estoy en una de las calles dónde la juventud se solaza con la botella de cerveza, bebiendo a morro o con el tubo de gin, acompañados del canuto. Entro en un pub atestado de chavales y nenas, algunas casi con tacataca. Pienso si sus padres saben que hacen y dónde están.

En la mesa del rincón hay un grupo de chicas y solo un chico, está sentado en las faldas de una morena que creo no pasará de quince, quizá menos.

—--¿Molesto si me apalanco aquí? Uso el lenguaje de la juventud.

—--No tío, —contesta la rubia—mientras no lo hagas encima mía.

Sonrío, me siento y pido al camarero que llega enseguida, una cerveza.

—--¿Os importa haga unas preguntas?, soy cronista de una revista literaria y querría saber cosas de vuestro mundo. La rubia que lleva trenzas, me dice con el cigarro en la boca.

—--Oye, ¿no será para la pasma, verdad?

—-No, soy de la Universidad para mayores y queremos conocer vuestros hábitos.

—--Bueno tío dispara ¿Qué quieres saber?

Abro la grabadora.

—--¿Estáis en la Universidad o en el Instituto?

—--Todas, menos este guaje que aún va al cole.

—--¿Que edad tienes chaval?

——Quince, pero este año termino y me iré a Formación Profesional, veo que los tíos de carrera no curran y los fontaneros, carpinteros y mecánicos molan mucho y ganan pasta. ¿A ti que te parece?

—--Pues que estás acertado, las carreras están saturadas y cualquier peón de albañil o mecánico gana más que un tío con carrera, además se colocan enseguida.

Mientras bebo a morro mi cerveza, veo que la chica que tiene en sus faldas al chaval, le esta metiendo mano. El impasible, cómo si no se diera cuenta mientras ella lo  trastea. Hay que ver lo que va de ayer a hoy, anda que una chica le iba a meter mano a un chaval en los años cincuenta, ni una hetaira se comportaba así en un bar. Primero que las mujeres no entraban a bares o cafeterías, si no era con sus maridos, y las solteras no lo hacían, estaba mal visto dos chicas en un bar, los curas decían que era pecado.

—-Oye morena ¿que vas a estudiar?

—-Tío, no me llamo “oye”, me dicen Loren, tengo dieciséis tacos y voy a Babel, y si quieres saber más, te cuento: mis padres creen que voy a dormir a casa de mí amiga Fátima, la rubia de las trenzas y ella le ha dicho a su madre que dormirá en la mía. Así, si nos sale un maromo potable nos vamos  a la cama, ¿o es que tu no te acuestas con títis, no serás parguela verdad? Y voy a estudiar enfermería, dicen que se liga mucho con uniforme, ¿Enterado majo?

Me llega el humo del porro que va pasando de mano en mano, al llegar a mi me lo entrega la tal Loren después de pegarle una calada profunda, yo, para no desentonar le doy una. Llamo al camarero, pido la cuenta de la mesa. Mientras viene con la nota, el chaval me dice:

—-No te vayas tío, aquí hay corte, éstas cuatro están sin ligue, puedes apañarte con alguna.

—-No gracias, tengo que llegar a la redacción antes del cierre, la entrevista tiene que salir publicada mañana domingo. Me levanto y salgo atufado por el olor a porro y cerveza agria. En la calle respiro el aire frió de la madrugada.

Así va la juventud, aunque ellos mismos no tienen idea y nosotros tampoco, de hasta dónde llegaran…

EL CURIOSO

Fimiosky

24-07-2014.- Nuestro compañero Juan Padilla nos envía el siguiente trabajo:

A LA BUSQUEDA DEL GESTO: DE LA ANTIGÜEDAD AL “PORNODISNEY”

En los antiguos jeroglíficos, el gesto se eleva como afirmación de una realidad desconocida. El perfil de NEFERTITI, altivo o misterioso, parece invitarnos a recorrer con ella el complejo mundo en el que habitaba, y que ni siquiera podríamos intuir si nos faltara el apoyo fundamental de la figura.

La importancia del gesto se nos muestra en todo su valor cuando intentamos desentrañar el cómo de este personaje, por ejemplo. Podemos imaginar su porte mayestático, sus tics autoritarios, su balanceo sugerente, sensual y cautivador. ¿Seremos capaces, también, de recrear el denso ambiente y el lento ritmo en que una ceremonia semejante pueda mostrarnos al personaje? 

En este mundo de sombras al que pretendemos incorporarnos, tenemos como inconveniente añadido el tiempo transcurrido; nuestra percepción actual de los hechos históricos los queremos medir de acuerdo a nuestras cadencias actuales. Por ejemplo, cuando en el cine de hoy contemplamos la imagen de Cleopatra, recostada en su lecho lánguidamente, es imposible que nos sustraigamos a otras expresiones corporales propias de nuestro tiempo. Así, en este gesto vago de la gran reina egipcia, adivinamos la tentativa de querer alcanzar un invisible teléfono o sostener perezosamente un cigarrillo  entre los dedos.

Se ha escrito que los gestos “son como efímeras esculturas construidas con la arcilla del aire”, pero, sobre todo, son hijos de una época y de una manera de sentir.

Esta pasada semana y sobre un escenario de Barcelona, Miley Cyrus, “la pornodisney”, con un estudiado sentido de la provocación, ha presentado su espectáculo a los miles de seguidores entusiastas en algo que se ha denominado pirotecnia musical. Luces, ruido, gestos procaces rompiendo la previa imagen de dulce adolescente.

¿Serán estos gestos todo lo efímeros que deseamos o el rigor histórico los conservará como expresión clara y manifiesta de manifestaciones algo demenciales de grupos enseñoreados en ilusos liderazgos?

JUAN PADILLA COLOMA 

22-07-2014.- Nuestro compañero Rafael Torres nos envía este poema:

PEDAZOS   

                                                                     Rafael Torres Julio 2014

Quiero hablarte de los pedazos de un sueño

que sólo tú y yo conocemos.

Aquello momentos,

cuando nos tumbábamos debajo de los chopos

y nuestros besos se mezclaban con el susurro del agua;

el eco de nuestros pasos

sobre los adoquines helados de la madrugada,

la vieja puerta desgastada de guardar intimidades,

las discusiones para romper el silencio del destino.

Quiero hablarte de la imagen de esos montes

que tú llamabas el aviso de la eternidad,

del jardín con flores copulando con el viento,

del gorrión descarado que comía en nuestra mesa.

Recordar los paisajes perdidos por falta de una mirada:

los almendros del valle con el invierno rodando hacia el mar,

el olor de la tierra bañada de arco iris,

los diamantes enredados en las olas por mil naufragios de luna,

la sombra humilde de los juncos en la serenidad de la tarde.

Quiero hablarte de todo eso.

Pedazos de un sueño,

roto por la canción del adiós en el brillo del rocío,

convertidos en sombras deshabitadas

bailando la danza amarga de la soledad.

Quiero hablarte y descargar estas palabras aquí,

donde todo acaba y nada empieza.

Porque en el sótano tirita mi corazón,

mientras la noche pasa vacía de las estrellas

donde reuníamos nuestros ojos,

la vida me empuja a subir a la taquilla circular,

comprar un billete sin memoria para cruzar

al otro lado del desierto,

y empezar de nuevo.

31-05-2014.- Nuestra compañera María Verdú nos envía este poema:

DESDE MI VENTANA

Llovía, gotas de lluvia, se filtraban ávidas

En el corazón, de la madera carcomida de mi ventana,

Procurándole a él y al mio un alivio momentáneo.

El mar tenia, el color acerado de los días tristes,

Pero la lluvia monótona, y mansa, conseguía infundir al paisaje, y las cosas,

La serena certeza de la vida cotidiana.

En el jardín, los caracoles escondían imitándome,

Sus transparentes, y vulnerables cuerpecillos.

Arropados, por la maleza compasiva.

Y llovía, llovía

Y su manto purificador, nos devolvía a todos, su color mas benigno,

Dejando atrás, la estela desvaída de las historias inconclusas

Maria Verdú Ramos

Junio de 2014. 

16-05-2014.- Nuestro compañero Antonio Fimia nos envía este poema:

ERES PRIMAVERA

De tarde en tarde la veo, es

alimento de mis sentimientos,

de mis deseos, adoro su cariño,

su amor por la vida y sus cosas,

sus verdes ojos relucen cual

yerbas en primavera llenas

del rocio nocturno que son

lágrimas de felicidad, de afecto

a todos los seres vivos que pueblan

el maltratado globo.

Ama la madre naturaleza, con su

aires que arrastan de los campos

el perfume de sus florecillas,

y de los mares sus olas calmas…

Sí, la amo con el corazón y con

el alma henchida de deseos, de

abrazos y confesiones sinceras,

a veces mi corazón se duele cuando

la miro y veo que sus labios han perdido

el acento de la alegría y sus bellos ojos

cegados por las lágrimas; cojo con

afecto sus manos frías, pero sé

que su corazón arde porque mi cariño

es amor de amigo.

El tiempo, aunque efímero va curando

sus desazones, ahora mira al cielo

ve que las nubes besan el azul claro,

y en las noches sueña con las estrellas,

que rutilantes besan su cálida y suave

piel…

Siente un gran amor por su hombre,

el que alimenta su cuerpo cuando terso

ansia ser usado como bálsamo de vida,

gusta ser acariciada en su tafanario, es

cálida y ardiente en el amor, el que

generosamente regala con pasión.

Este poema intimo a una amiga a la que quiero y amo deseándole mantenga viva la llama que sé arde en sus adentros, no sé si lo guardará, el aprendiz de poeta no lo guardará, será propiedad de la amada amiga y lo hizo en honor a su belleza y al verde de esperanza de sus ojos.

Primavera 2014

14-05-2014:-Nuestra compañera Mª Jesús Ortega nos envía el siguiente trabajo:

Mirando voy como corre el agua por la vereda.

 Al borde del camino, escucho su rumor…

¿qué me dirá?, yo sigo su recorrido,

 a veces recto, a veces curvo, pero sigue más,

sigue cantando…

Y no se cansa…, de día y noche, sigue el camino

y se abre paso, toma la tierra, calma su sed

y la enriquece. Nada le pide, todo le da

y sigue,  sigue… Sigue cantando.

Santurde de Rioja 31/08/2013

                              14/05/2014

Mª Jesús Ortega Torres

01-05-2014.- Nuestro compañero Juan Padilla nos envía el siguiente trabajo:

EL TESTAMENTO DEL SOLDADO  

LA GRAN GUERRA  (1914-1918)

A finales de Julio se cumplen los cien años del comienzo de la Primera Guerra Mundial. Las librerías de todo el mundo se llenan de libros evocadores de una de las tragedias más sangrientas padecidas por los pueblos, con 9 millones de combatientes muertos, mientras se revisan documentos que intentan explicar los motivos del gran desastre.

En los grandes cementerios del Norte de Francia y de Bélgica, al igual que en los de la costa atlántica tras la Segunda Guerra Mundial, aparecen ante el observador ocasional unas cuadrículas de cruces blancas que llenan el horizonte. Diríase que en aquel reino del silencio se pretendiera enterrar el fragor de las armas de fuego y el espíritu de la guerra. La ambición humana ha hecho que este propósito quedase relegado a los espacios de la quimera, enterrados bajo la piadosa floración de amapolas, que luego irán a decorar las solapas ciudadanas en las conmemoraciones al efecto.  

Está luego la enternecida mirada de quienes perdieron a los seres queridos, cuyo  recuerdo parece sobrevolar el lugar, con toda su carga nostálgica por la pérdida de aquella juventud inmolada en un incomprensible altar patriotico.

En Gran Bretaña se acaban de editar más de 300.000 cartas de soldados intervinientes en la gran conflagración, dirigidos a familiares, esposas y novias. Muchas se convierten en verdaderos testamentos  ya que muchachos de 17 a 20 años, en su mayoría, no regresaron nunca.

En aquellos camposantos se encuentran enterrados los  cuerpos de los combatientes acompañados de sus esperanzas frustradas.

Tal vez un destino compasivo nos ahorra poder contemplar el  estupor de sus rostros ante la muerte.

JUAN PADILLA COLOMA

25-04-2014.- Nuestra compañera Mª Jesús Ortega nos envía el siguiente trabajo:

¡HOY ES EL DÍA DEL LIBRO!

“El que lee mucho y anda mucho, va mucho

y sabe mucho”

“El ver mucho y el leer mucho avivan los

ingenios de los hombres”.

MIGUEL DE CERVANTES

“Que otros se jacten de las páginas que

han escrito; a mí me enorgullecen las que

he leído”.

JORGE LUIS BORGES

Para todas las personas, el libro tiene el mismo significado y finalidad, pues todos lo queremos como un amigo, que de modo incansable, continuamente, nos forma e informa, acompaña, y que además, nos invita a reafirmar o discrepar, todo lo que su autor nos oferta, ya que cuando vamos formando nuestro criterio, no siempre respondemos con conformidad.

Un libro nos da mucho a cambio de muy poco. La parte crematística, no es para él, es para el editor y el autor. Nuestros libros, solo nos piden que los abramos y los leamos, y son los libros los más importantes vectores en nuestra cultura, pues ellos nos inyectan una cualidad, que va a ser muy determinante para formar nuestra personalidad: la curiosidad por saber más. Por conocer…

Desde pequeños, nos motivan a coger un libro, nuestros familiares y maestros. También los compañeros de colegio - más tarde, amigos -. En nosotros mismos encontramos la motivación, cuando arribamos a las librerías y en sus expositores nos encontramos, con lo último del tema que nos gusta, y no nos cansa, o con el autor que más nos seduce.

Hoy día 23 de abril, es el “Día del libro” porque dos grandes genios de la literatura universal: Miguel de Cervantes y su coetáneo William Shakespeare, murieron en ese día, aunque de 1616, y se dice, no obstante, que si bien Cervantes, según el calendario “gregoriano”, que regía para las naciones católicas, murió el día 23 de abril, Shakespeare, murió según el calendario “juliano,” el día 3 de mayo, siendo el desfase de 10 días, fue corregido, posteriormente, cuando instauraron los protestantes el calendario gregoriano.

Ambos fueron insignes poetas, dramaturgos, autores de novelas que marcaron su época y siguen marcando la nuestra por

el conocimiento, de ambos, del tiempo que les había tocado vivir y el conocimiento de sus gentes, que supieron plasmar como nadie en sus obras, llegándonos a nosotros, tan frescas y amenas, como las escribieron. Nos lo hacen revivir cuando les leemos, apreciando, además, todo lo que tienen en común, estos dos genios de la literatura que además de adornar, su extensa producción, con sabios y filosóficos pensamientos, puestos en boca de sus personajes, que han perdurado y perdurarán, por lo actual de su contenido, tuvieron los mismos maestros e inspiradores en Apuleyo, Virgilio, Horacio, Homero…, siendo además Cervantes, el precursor del realismo mágico, estilo literario, que percibimos en alguna de sus “Novelas ejemplares”, y, siendo su novela “Don Quijote de la Mancha” la obra más preciada donde las hubiera, y en donde caben todas las metáforas habidas y por haber. Todas ellas, muy bien colocadas.

Cervantes trabajó duro, en medio de muchas vicisitudes, encarcelamientos, y batallas, siendo algo de “Don Quijote”, él mismo, y sin pretenderlo...

Las circunstancias, acomodan los hechos y estos dos coetáneos, nos supieron transmitir su época con sus gentes, sus fantasías y realidades, que son las mismas de ahora, aunque ahora, sea otro tiempo.

Hace solo siete días que nos dejó Gabriel García Márquez, a quien escuché decir que desde niño quería ser escritor. Lo consiguió, llegando a lo más alto (Premio Nobel de Literatura en 1982). Con su estilo fue maestro y ha quedado como tal, para quienes quedaron detrás. Todas sus obras tienen la propiedad de “engancharte”, e ir pegada a la novela hasta que se termina. Igual pasa con las obras de Cervantes y Shakespeare.

Seguiremos leyendo todo lo que caiga en nuestras manos, que con un poco de la experiencia que han cosechado, seguro que será algo bueno.

ALICANTE 23/04/14

Mª Jesús Ortega Torres

24-04-2014.- Nuestro compañero Rafael Torres nos envía el siguiente poema:

                                                                SEÑORA AMIGA                                                            Rafael Torres Candela

Señora amiga,

la gente salía diciendo

que habías estado espléndida,

pero cuando yo llegué

el escenario ya estaba en sombras

y tú celebrabas el éxito en aquel sitio

exclusivo para gente afortunada.

Llegué tarde,

estuve en una cola muy larga

que por mucho que se movía

yo siempre era el último.

Señora amiga,

tu sombra se pasea nerviosa

por la luz de la ventana,

será por los gritos:

en esta madrugada se insultan

la basura del pasado

y los miedos al futuro.

Déjame entrar,

te traeré cigarrillos, tranquilizantes

y todo lo que necesites;

te seguiré queriendo aunque

vea tu belleza sin maquillaje,

tus canas despeinadas,

tu mal humor y tu monólogo de silencio.

Podría ser que me sienta tentado

a preguntarte tu verdadero nombre.

Mientras tú te tomas una taza de café

yo me beberé todas las tazas de tu fragilidad.

Si quieres, me quedaré contigo

y estaremos juntos cuando los sueños

vuelvan con las manos vacías.

Señora amiga,

la cola para verte era muy larga,

pero, aunque tarde,estoy contigo.

10-04-2014: Nuestro compañero Antonio Fimia nos envía el siguiente poema:

                    MI MUSA

Si la miro veo destellos de luz.

Si sus ojos brillan sale el Sol.

Si habla, su voz es meliflua,

Si camina acaricia los suelos.

Si danzara sería odalisca.

Si sonríe se abre la primavera.

Si en  la noche sueña baila con

                                    Sílfides.

Si la besa el terral, lo convierte

                          en cálida brisa.

Si fuera flor sería la de Alejandría,

que el rocío de la noche es llanto

de estrellas que besan su amor

y se abre al mundo de los arrebatos…

Af.

2.04-2014: Nuestro amigo y antiguo tertuliano Juan Padilla nos envía el siguiente artículo:

SOBREVOLANDO AL ESCRITOR 

                                                           “Soy un ser humano. Por consiguiente, todos                                                                                                     los diablos anidan en mi corazón.”

                                                             Chesterton.                                                              

     EMILE HERZOG pertenecía a una familia judía alsaciana que se traslada a Normandía cuando Francia pierde Alsacia y Lorena, tras la guerra franco-prusiana de 1870.

     La familia decidirá reconstruir en Elbeuf sus instalaciones fabriles, aportando a la industria textil su dilatada experiencia. Años después  Émile llegará a dirigirla, pero, antes, su existencia se verá marcada por importantes acontecimientos.

     La primera guerra mundial le llevará a convertirse en enlace del ejército francés con el cuerpo expedicionario inglés. Este contacto y su gran conocimiento del mundo anglo-sajón le permitirán escribir su primer libro.

     Es en este momento en el que decide cambiar su nombre, aconsejado por su editor: André Maurois será el seudónimo por el que será conocido uno de los más importantes escritores galos de su tiempo, que luego se convertirá en su nombre legal.

    Cuando en 1918 aparece “Los silencios del coronel Bramble”, editado por Grasset que ha apostado por él, la crítica se muestra favorable y entusiasta, y las nuevas ediciones se suceden. Anatole France y Kipling, a quienes les ha remitido un ejemplar, lo elogiarán. El propio Maurois escribirá, con su buena dosis de ironía   “…desconocido, yo no tenía enemigos ni molestaba a nadie y se me podía elogiar…”.

Partidario del entendimiento entre los dos países, expresaba la opinión de que esperaba que su libro ayudara a que los franceses comprendieran mejor a los ingleses y éstos a los franceses.

Aún escribiría un segundo volumen con los mismos personajes de los “Silencios”,  “Las paradojas del Doctor O ‘Grady”,  acogida también favorablemente por el público, pero que decepcionó a la crítica. Estos éxitos iniciales, su formación humanística y su cultura le impulsaron a dedicarse cada vez más a escribir, abandonando poco a poco sus lazos con la dirección de la fábrica, bajo la mirada suspicaz de Janine, su primera esposa.

La pareja sufría por la sensación de abandono que experimentaba la mujer, considerando egoísta la actitud masculina de entrega absoluta a su labor de escritor, una actitud que, como reconocería el esposo en sus memorias, “parecía sufrir en mí esa seriedad inflexible que ella llamaba mi pedantería… y ese egoísmo inconsciente  del artista”. “Puesto que comprende tan bien [a sus personajes]-parecía pensar ella-, ¿por qué no cambia”.  Y él que sentía lo absorbente de su trabajo, sin poderlo remediar, comenzó a plantearse la necesidad de cambiar de actitud, pensando en la defensa de una unión que tantos momentos felices les había proporcionado.

Cuando Janine enfermó, los médicos aconsejaron un clima templado y él no dudo en acompañarla:

“Aprovéchate de mí… No me tendrás mucho tiempo para hacerte desgraciado…”

Cuando poco después falleció por una grave infección, el enamorado escribió “estar consumido de dolor y de amor”.

Aun así, el intelectual en uno de sus escritos proclamaría:

“El hombre digno de ser llamado tal ama su trabajo sobre todas las cosas, incluso más que a la mujer que ama. Esta es una de las cosas de los hombres que las mujeres no comprenden”.

La mujer, no obstante, como fuente de  belleza y de sentimientos, goza de la admiración de Maurois. Ya de joven la idealizará.  Será la Reina de un cuento de su niñez. Y su carácter tímido y algo pedante hará que las contemple con circunspección y prudencia. Buscará en ellas a la compañera, la confidente, el amor y el intelecto:

A las mujeres les envía libros: “Le vase étrusque” de Merimée y el “Intermezzo”,  de Heine…”Esperaba flores y le sorprendió. Pero yo continuaba siendo  el hombre que había sido  a los dieciocho años y que hablaba con las muchachas del “Tractatus politicus”, de Spinoza”.

No conformándose con la mujer, precisa la heroína. Buscará el ideal “más que de  carne y sangre, de claro de luna y cristal”. Una “sílfide” que va tornando hacia  Natacha, la heroína de Guerra y Paz. Y en un impulso violento cree hallar su ideal en la realidad, “porque sus cabellos tenían el color de las espigas y sus ojos la tonalidad del no-me-olvides”, pero secretamente confía, exige, que comparta con él la misma violenta pasión por la poesía y la búsqueda del conocimiento.

Cuando conoce a Simone, la que se convertirá en su segunda esposa, queda conmovido por su belleza y entusiasmado por la descripción que de ella hace Proust, amigo de la familia, a través del personaje de Temps Retrouvé,  Madeimoselle de Saint- Loup: “   La encontré muy bella, llena aún de esperanzas. Sonriente, formada de los mismos años que yo había perdido; se parecía a mi juventud”.  Y añádase  que de niña ha conocido a Anatole France, con quien ha visitado los museos de Paris. “Me parecía nimbada de preciosas imágenes”. Todo un personaje maravilloso.

Tras algunas vacilaciones por  temor a las convenciones sociales, se casaba con ella, iniciando un nuevo camino sentimental, y formando una nueva familia con los hijos de ambos.

Trabaja  incesantemente. Publica “Ariel o La Vida de Shelley”, su primera incursión en el terreno de la biografía, a la que seguirá “Bernard Quesnay”, novela  autobiográfica. Un año después aparecerá Climats, la que le hará realmente famoso, en la que hace un verdadero y brillante  análisis psicológico de los sentimientos de los personajes, atrapados en sus propias contradicciones. En el relato, el hombre se convierte en la victima de la infidelidad y de las dudas. En la segunda parte, será su segunda esposa la que sufrirá el infierno de los celos, repitiéndose aquí, como ya se  ha señalado, el caso de Sthendal  que, aun describiendo un personaje femenino, éste no deja de ser siempre Julien Sorel, su protagonista masculino de El Rojo y el Negro.

Se puede hablar de una intensa carrera. El provinciano se convierte en un escritor mundano y cosmopolita cuando llega a Paris. Ha tenido la suerte de encontrar en su juventud la ayuda inestimable del filósofo Amiel.  Ahora se codea con grandes figuras: André Gide, Martin du Gard,  Anatole France, Poincaré, Lyautey, Pétain.. Todos coinciden con él en los salones parisinos o en acontecimientos literarios. Mientras, aparecen novelas,  ensayos,  historias y biografías magistrales: Byron, Disraeli, Balzac, Napoleón y muchas más. Se ha convertido  en el renovador del género junto a Zweig y Ludwig. Un biógrafo “que parece más bien un forense que profundiza  en el cuerpo que investiga”, removiendo en la muerte la memoria que pueda devolverlo a la vida.  Es también un conferenciante que se multiplica y que llena los recintos de un público entusiasta. Su estilo es claro, preciso, que capta al lector que se siente atraído por este escritor que parece comprender  “el mundo de los otros”. El hombre que ha sabido entender mejor que muchos otros la reflexión de Marcel Proust:

         “El Universo es cierto para todos nosotros y distinto para cada uno”.   

Se ha convertido en el escritor que él quería ser y que ha retratado en Ariel o la vida de Shelley, cuando éste, de muchacho, hace su juramento:

“Juro ser prudente, justo y libre, en tanto me sea posible. Juro no hacerme cómplice, ni por el silencio de los egoístas y de los poderosos. Juro consagrar mi vida a la belleza”.

El 22 de Junio de 1939 se celebra la sesión de ingreso del escritor en la Academia Francesa. Es la culminación de una carrera. Maurois contempla con una cierta melancolía a los amigos de juventud que le acompañan: “aquellos muchachos  con los que yo había jugado a la pelota, parecían como si se hubieran disfrazado de viejos”.

Es la época de graves acontecimientos que le preocupan. Se muestra pesimista a pocos meses del inicio de la Segunda Guerra Mundial, y no comprende la desunión de los franceses ni la incompetencia de los políticos, que se pierden en discursos vanos. Este hombre que trabaja con las palabras, llegará a escribir:

“Si se comprendiera mejor los peligros que supone el empleo de ciertas palabras, los diccionarios colocados en las librerías llevarían una faja .roja que dijera:” Explosivos. Manéjese con cuidado…Poseemos cañones antiaéreos, pero nos faltan baterías anti oratorias”.

En 1941 escribe sus Memorias, que intenta  justificar: “¿Por qué no habría de intentar pintar al hombre tal como creo haberle conocido? Sabe que puede enfrentarse al riesgo de caer en un narcisismo excluyente de objetividad.  Correrá este riesgo: “El personaje es el hombre que los demás piensan que somos o hemos sido”.  Y decide explicarlo.

André Maurois fue un escritor preclaro y culto. Su otro papel como conferenciante o como profesor fue muy destacado. Durante sus frecuentes estancias en  los Estados Unidos comprobó que algunos profesores de Universidad desarrollaban cursos sobre cómo mejorar las relaciones entre las  jóvenes parejas norteamericanas.  Esta experiencia le decidió a escribir un guion radiofónico titulado “Curso de felicidad conyugal”, que obtuvo un buen éxito y que fue traducido para las emisoras de medio mundo. Aunque hoy el texto pueda parecer ingenuo, quisiéramos reflexionar sobre uno de sus capítulos “La corte y la conquista”. En éste, considerando el papel pasivo de la mujer escribió: “La mujer espera al hombre, sí, pero como la araña espera a la mosca… es más bien la muchacha quien, de la amistad  o del amor, hace un matrimonio”.

Tal vez en él, en su obra, encontremos la frontera que marca la línea que separa su mundo y sus ideales de  ese otro que hemos conocido y en el que nos ha tocado vivir. Surge la pregunta de si este buen conocedor del comportamiento y de las pasiones humanas podía haber entrevisto la gran revolución social de 1968, un  año después de su muerte.

 Juan Padilla Coloma

24-03-2014: Nuestro amigo y antiguo tertuliano Juan Padilla nos envía la siguiente reflexión:

JAVIER CERCAS Y ADOLFO SUAREZ

        En Soldados de Salamina, Javier Cercas contaba una historia basada en unos hechos acaecidos durante la guerra civil. Durante todo el relato persigue la figura de Miralles, alrededor de la cual gira prácticamente toda la obra.  Decía Philip Roth, en una reciente entrevista, que “las novelas crean la ilusión de una realidad más parecida a lo real que la nuestra”. Cercas fue creando el escenario en donde Miralles aparece y desaparece como protagonista involuntario. Estará presente en la mente del lector hasta que por obra y gracia del escritor se esfuma -…”como si en vez de ver a Miralles, ya le estuviera recordando”…-, para ir a sumarse al gran desván de la nostalgia, entre los sueños rotos de los que pasaron por sus páginas.

        Ahora, en una de sus obras, “Anatomía de un instante”, lo que hace el autor es manejar todos los elementos que intervienen en el golpe del 23F. Son hechos conocidos por todos nosotros, que los  vivimos con la intensidad  que impone la certeza de estar asistiendo a un hecho histórico, y que además tienen rostro y figura porque fuimos “testigos presénciales” del acontecimiento. Posiblemente, esta  haya sido la noticia política con mayor cobertura mediática de la Historia, hasta ese momento. Y consecuencia directa de su fracaso. Toda realidad tiene, al menos, dos rostros, dos lecturas, dos interpretaciones. En este caso la noticia sólo tenía una cara. Imposible abstraerse de la realidad que ofrecían las imágenes: los “héroes” de esta aventura no mostraban la parte gloriosa y risueña que hubieran querido sino el lado huraño y grosero de la violencia. Perdían la oportunidad de ser “soñados”, idealizando sus actos.

        En esta crónica o ensayo, Cercas revive unos acontecimientos y unos personajes que protagonizaron unos momentos dramáticos, destacando las figuras de Suárez, Santiago Carrillo y Gutiérrez Mellado.

        Adolfo Suárez ya no era el centro de la sesión parlamentaria, tras su dimisión a la presidencia del gobierno. Leopoldo Calvo Sotelo se postulaba como pretendiente a esa presidencia.

        Suárez, que había dirigido la transición hacia la democracia desde un sistema autoritario y personalista, se encontraba ahora solo y aislado de sus propios compañeros de partido. El hombre audaz que había ido cambiado la sociedad de su tiempo, que  tenía muy claro en qué dirección debía dirigir sus esfuerzos, conocía ahora la soledad. Sus últimos errores, especialmente su proyecto del Estado de las Autonomías generalizado, le habían llevado a una situación de crispación insostenible.

        Hay en el libro un curioso paralelismo, que el autor recoge de un editorial de El País, entre el personaje del General de la Rovere y su evolución psicológica posterior, con Suárez convertido al final “en héroe de la España democrática”.

        Es cierto que las sociedades no tienen muchos elementos de juicio para valorar a los servidores públicos y su elección es a menudo más un hecho emocional que el resultado de una reflexión crítica. Para explicar los votos conseguidos por Adolfo Suárez, Cercas nos cuenta: “Además de los éxitos políticos cosechados… le votaban en parte porque era como a ellos les hubiera gustado ser, pero sobre todo le votaban porque, menos por sus virtudes que por sus defectos, era igual que ellos…” y añade: “Suárez no los defraudó: construyó un futuro para ellos…”

        El instante que el escritor analiza es el del ya ex presidente sentado, imperturbable, ante la amenaza de las armas y el coraje para enfrentarse a esta amenaza, después.

        Con el tiempo, quedaron atrás sus éxitos y sus fracasos. Hubo un período para la admiración y otro para la crítica feroz. Con Adolfo Suárez volvió a suceder algo que se ha repetido a través de todos los tiempos: el precio que se ha de pagar por algo que se ha llamado “el peso de la púrpura”. El juicio de la Historia precisa de la perspectiva del tiempo, para bien o para mal.

        En la Francia de la Tercera República, un político muy poco apreciado por el gran público adquirió una gran popularidad cuando se alejó del círculo del poder. Uno de sus eternos oponentes comentó con ironía: “Es curioso, pero este hombre contra todas las leyes de la perspectiva cuanto más lejos está más grande nos parece”.

Descanse en paz.

Juan Padilla Coloma

Marzo 2014

20-03-2014: Nuestro compañero Rafael Torres nos envía el siguiente trabajo:

CARTA A JEANNE ,

(“La doncella de Orleans “ )          Rafael Torres

  

Amada Jeanne:

He de confesarte que te he sido infiel con otra mujer, tú ya sabes como somos los hombres,pero te aseguro que te he querido y venerado durante toda mi vida,desde que era un niño.

Ya me lo advirtió mi madre que lo nuestro no podía ser, tú eras una mujer quinientos treinta un años mayor que yo, así que  andando el tiempo me enamoré de otra,que por cierto, se parece a ti.

Ya sabes que los hombres siempre nos justificamos; tú creíste que podrías con ellos, pero sólo tenías a Dios de tu parte.

Tú no pudiste imaginar que una insignificante criatura del futuro iba a caer rendido a tus pies,  porque lo que entonces tenías a tus pies era el fuego del odio.

Fue  un buhonero, vendedor de flanes,quién me dio estampas de tus imágenes.

Tan pronto te vi me enamoré de tu soledad: soledad frente enemigos, soledad entre amigos,en tus ideas visionarias; soledad prolongada en tus estatuas a merced del frío,de las palomas y de los sermones.

En los cromos de colores,tu armadura de acero azulado brillaba intensamente cuando en mis campos desiertos caía las tarde de domingos en blanco y negro,hora triste para los poetas, hora alegre para los mochuelos a punto de cenar.

Yo me ponía de cara al viento del norte con la esperanza de que me trajera  las cenizas de tu belleza, belleza de heroína adolescente, protectora contra mis días grises sin más fin que sus propias noches.

Espero que cuando recibas esta carta no la tires a la basura,porque seguro que a estas alturas ya estarás harta de tantos miles y miles de hombres que a buenas horas te quieren.

Con todo mi amor

20-03-2014.- Nuesta compañera Mª Jesús Ortega nos envía el siguiente poema:

SE HA DESPERTADO YA LA PRIMAVERA,

la despertó el sollozo de su amado, y ahora, su conjunción

espera un beso, un abrazo después de su letargo.

El amado la contempla…, mil soles coronan su cabeza

el perfume de las flores, su cuerpo y alma, también, han adornado,

y una lluvia, tenue y esporádica, su ambiente está limpiando.

¡Oh primavera que llegas, a encontrarte con tu amado!

vienes radiante, perfumada, joven, iluminada…

siempre dispuesta a amar y a que te amen,

anhelando  que se unan corazones, entre tus flores,

mariposas, azules cielos, cantarines pájaros,

todas las aves bajo tu manto.

Tu viento es refrescante y, que estando cautivo,

salió para sembrar, todos los campos.

¡Oh primavera, has venido!

Toda la naturaleza, nos lega tu dulce y joven canto.

Alicante 24/03/2013

Mª Jesús Ortega Torres

16-02-2014.- Nuestro compañero Antonio Fimia nos envía lo siguiente:

PALABRAS 

El idioma Español es posiblemente una de las lenguas que más ha bebido en el griego y la lengua del Lacio junto con el italiano, y que quizás sea el que más vocablos tiene; da pena ver que cada día la gente joven usa menos palabras, maneja un lenguaje gutural de monosílabos, tan escueto que seria mejor que usaran el morse para entenderse, aunque no creo se puedan comunicar mucho cuando en una discoteca hablan de tú a tú con miles de decibelios atronando la sala.

 Mucha culpa la tienen los mismos españoles, catalanes, vascos, gallegos y valencianos con su empecinamiento (en algunos casos) en que se usen éstas en detrimento del español, lengua que usamos mas de cuatrocientos millones de personas y donde cada día se incorporan en el mundo más hispanohablantes. También los periodistas, tanto en la televisión como  en radio y prensa diaria; ellos son los más,  debieran ser  más cultos, los que cuidasen el leguaje hablado y escrito. Me parece perfecto que los catalanes en su prensa, radio y televisión digan Lleida  y Girona; Los gallegos A Coruña y así sucesivamente, pero las emisoras y periódicos del país, que son muchos más, deben hablar correctamente y decir Lérida, Gerona y La Coruña.

Respeto que hablen sus lenguas maternas aquellos pueblos que las tengan,  son suyas, las primeras que oyeron al nacer, aunque no todos, pues conozco muchos catalanes, vascos, gallegos y valencianos que no saben leer y mucho menos escribir la lengua materna, y muchos de ellos, la mayoría, no usan la escritura correctamente, según su gramática.

Otro gran enemigo es la misma Academia Española con su constante incorporación de palabras foráneas, sin preocuparse de darle una traducción correcta o buscarle una nueva palabra en castellano, sin necesidad de recurrir a las de fuera.  ¿No seria posible esto? 

A.   Fimia

Noviembre 2.003

PALABRAS

Amigo/a

Odio

Anglicismos

Hijos

Dame

Guerra

Ascuas

Ella

Miradas

Quizás

Besos…

Ámame

Viento

Odios

Olimpo

Guazonería

 Madre

Pasión

Arvejana

Melocotón

Colibrí

Quijote, Séneca y vino

Kenia

A la soledad

Mí amada…

Verde

Azahar

Cocido

Vino

Siete

Hijo

Hijo mío

La noche

Costilla

Libélula

Choza en sierra

MI Musa

Amigos, tranquilidad y noche

Fimiosky

15-02-2014:- Nuestra compañera Mª Jesús Ortega nos envía el siguiente relato:

Siempre dando gracias

(Relato) 

         Me llamo Muna, y Dios me dio la cualidad de saber apreciar la verdad, y tratar de hacerla mía en cada pensamiento y decisión de mi vida.

         Por la verdad lucho,

         por la verdad, a veces, sufro,

         por la verdad,  me muevo en un mundo que me ofrece una cara como verdadera, pero que luego, me defrauda. Ese mundo me deja con el trabajo de calificar.

         Al ser humano le pasa, a veces, que hay algo que le impide pensar, más sin embargo, no por eso deja de sonreír y vive…

          Puede pensar y no tomar partido, y es como dejar pasar de largo, algo que podría cambiar las cosas, pero que, de modo indiferente, al no decidirse a ejecutarlas, hace que sigan igual.

         También puede vivir aunque esté triste y sea desgraciado…, porque esto de vivir, es  una necesidad, y, en las masas, esta necesidad individual, encuentra apoyo y se reproduce entre aquellos, más rezagados, que todavía no la sintieron. Al hombre le entristecen sus carencias. Las siente aunque no diga nada y, tanto si sus necesidades tienen un origen en lo físico o lo tienen en lo afectivo, calla hasta que llega al límite de sus posibilidades, pero  sabe que no se puede pensar, de modo óptimo, si no es con el estómago lleno.

         La desigualdad en los seres humanos, es mayor o menor, según sea el lugar en el que nos ha tocado nacer y vivir. No en todos los lugares hay la misma evolución, no por eso deja, el ser, de querer ser feliz

         Tener a alguien en quien creer, le alienta a tener una esperanza y confianza de mejorar todo. Es ese Dios que todos llevan en los labios, continuamente…

         Le necesitan para disculparse…

         Le necesitan para agradecerle…

         Le necesitan porque lo llevan en los genes…

Antes de nacer la madre sentía a Dios  como esa palanca que creía única, verdadera, y la mejor porque, de momento, le permitía ese apoyo y ese consuelo y no le solicitaba nada a cambio, solo su fe.

         Hoy, esta tarde, me ha llamado Janira, la maestra de mi hija Norah, para que me la lleve a casa. Mi hija está llorando porque su amiguita Jazmín, la ha tirado al suelo de un empujón. La maestra me cuenta que tiene su mano derecha algo inflamada, y me dice como le ha vendado la mano poniéndole debajo del vendaje un cubito de hielo y también un cabestrillo, pero he de llevarla a Urgencias para que le hagan una radiografía.

         Norah quiere mucho a Jazmín, la quiere como a una hermana y siente mucho sus rabietas, no  le gusta que  sea tan caprichosa. Hoy Jazmín quería el cuaderno de Norah porque en la pasta, venía el dibujo de dos gatitos. Norah me ha dicho que a ella también le gusta su cuaderno y que  “Jazmín se tiene  que acostumbrar a respetar lo de los demás desde pequeña, como yo hago…”, estas palabras en boca de mi hijita de siete años, me han llenado de alegría, y he dado gracias a Dios porque mi pequeña no tenía la mano rota y porque sea tan razonadora y seria, mi niñita tan pequeñita…

         Mi marido Hussein, se ha marchado a Jordania, donde abunda todavía el trabajo. Si encuentra un puesto que le  convenga, cambiaremos de residencia. Nos mudaremos como hacen los caracoles, con la casa a cuestas…, diremos adiós a este paisaje, a la familia, a estos amigos. Yo seguiré, desde casa, pintando mis pequeños cuadritos de palmeras y las puestas de sol que ahora serán de Amán. Las de mi querido Cairo, las llevaré en la memoria…, no las podría olvidar nunca.

         Si todo va bien, daremos gracias a Dios, y si no fuera bien, también le daríamos gracias por la esperanza del mañana. Queremos tenerle contento, y aún así, mira lo que pasa…

ALICANTE 30/01/2014

Mª  Jesús Ortega Torres

         Este relato está inspirado en  la novela  de NAGHIB MAHFUZ, “El callejón de los milagros”, pues sus personajes nombran continuamente a Dios, no porque sea una costumbre, creo que lo hacen por una necesidad vital para ellos.

         Pienso que hay una necesidad de Dios como Dios divino, no como nos lo transforman la mayoría de las religiones, materialistas, dogmáticas (el ser cambia, como la luz y el río, no se puede encadenar a un hombre) y faltas de espiritualidad.

         Mª Jesús Ortega Torres

         Alicante 15/02/2014

26-01-2014.- Nuestra compañera Elvira Pizano nos envía el siguiente relato:

Se sube el telón, y aparece un país de ensueño, con sus habitantes felices paseando por unos jardines floridos, estatuas y fuentes luminosas.

Se baja el telón. ERROR. Se sube de nuevo.

Un mercado, antes floreciente y que ahora llora de tristeza, es lo que ven nuestros ojos.

La gente con mirada triste, camina lenta arrastrando un carro que piezas originales ya no conserva.

Uno de los pocos puestos que sobreviven es el de la carne, bien pobre de género.

A Dolores le toca el turno y le pide a Prudencio, el carnicero, morro de cabrito y, unos cuantos huesos y le comenta: “Hoy la gente ha sido muy generosa y haré un buen guiso, es el santo del alcalde.”

Otro cliente comenta, “¿habéis visto el bando que ha puesto el ayuntamiento?” dice así, más o menos: “Como la gente está en el paro y no tiene dinero para pagar impuestos, done sólo una parte de las limosnas que recojan a las arcas del ayuntamiento, pues está pronta la llegada del primer mandatario de Amaitán, y necesitan recaudar fondos para agasajarlo. ¿Qué os parece?.

“Pues esta mañana,-comenta el carnicero- en la radio han dado la noticia, de que por nuestro bien, nos abstengamos de comprar dulces estas fiestas, ya que los azúcares que contienen perjudican muy seriamente a nuestra salud; y el dinero que íbamos a invertir en ello, lo donemos para que la corporación municipal se tome unas vacaciones, pues necesitan reponerse del estrés que les está produciendo la maldita crisis. ¡Ah!, otra cosa, nos advierten que en los próximos impuestos, nos cobrarán un suplemento por sentarnos en un banco a tomar el sol a razón del tiempo que estemos en ellos, pues el sol está considerado un bien para la salud.

Y salta Dolores toda excitada “pues, sabéis que os digo, que lo veo justo, bastante nos han hecho disfrutar ellos con las hogueras, semana santa, corridas de toros, moros y cristianos, etc. etc. ¿eso se os ha olvidado? ¿Y los champiñones que han puesto en las calles, que me decís? Son preciosos Y que opináis de lo generosos que fueron los bancos con nosotros? Que si querías dinero para un piso, y además comprarte un yate, ellos te lo daban; y, ahora es justo que nosotros nos sacrifiquemos un poco para que la Merkel no los agobie más”.

Todas las personas que allí había querían matarla, pero la llegada oportuna de su marido los frenó

“¿Pero no os dais cuenta que ha perdido el juicio?”

Todos lloraron de tristeza.

Y lentamente se baja el telón.

26-01-2014.- Nuestra compañera Elvira Pizano nos envía el siguiente poema:

ENCUENTRO

Nos ha convocado la poesía.

Besos, abrazos emocionados…

Y además hoy, es mi cumpleaños;

Y que mejor regalo me puedo hacer

Que un estuche lleno de palabras, ya sean

Arial, calibrí o candara.

¡Tienen tanto poder las palabras!

Uniendo unas a otras formamos un verso,

Y añadiendo unas cuantas más, llegamos a la estrofa.

Y con estos versos y estrofas componemos un poema.

“¿Adónde te escondiste amado,

Y me dejaste con gemido?”

Los he escogido al azar recreándome,

Y acariciando la calidez y textura de las hojas,

Ya amarillas por el paso del tiempo del

“Cántico Espiritual”

          ¡Oh mi Dios!

Si yo tuviera o tuviese el don de la escritura,

Escribiría versos convulsivamente;

Le cantaría a la raya de un lápiz,

Al borde de una copa,

 A la sonrisa tierna y a la vez triste de un anciano,

          O a las cosas más insólitas.

¿Por qué no me lo has dado?

Pero no te apures Señor,

Que hay tantos poetas que han escrito para mí

Versos tan hermosos para que yo los lea:

“La lluvia, ciñe sobre los hombros de abril

Su chal de brisa y lentejuelas”

                                                       Por ejemplo.

Elvira Pizano Rovira. Octubre 2013                

25-01-2014.- Nuestro compañero Rafael Torres nos envía el siguiente poema:

EL DILUVIO.                                    R.afael Torres

Amada,

construí tu rostro sobre la noche,

aprendí a reconocerte a lo lejos

por el contorno de tu espalda

y el movimiento de tus caderas.

Aprendí a amarte en la ausencia

cuando sólo teníamos cinco minutos

para los besos y el te quiero,

pero al fin vamos a estar juntos.

He construido el arca,

 la he puesto a tu nombre

y al fin empieza el diluvio.

Amada,

El Instituto Nacional de Meteorología

dice que la lluvia durará mucho tiempo;

aquí dentro encerrados, sin poder salir,

¿que vamos a hacer a solas tú y yo?

Si hacemos sólo sexo nos vamos a aburrir,

será mejor que hagamos el amor:

el diluvio va para largo.

21-11-2013.- Nuestro compañero Antonio Fimia nos envía el siguiente poema:

PENSAMIENTOS

Como el agua que corre por la atarjea

así van mis pensamientos, encajonados,

como el aire que se filtra por rendijas

de mis  trasparencias, sin  respuesta

como el primer rayo de sol que alumbra

el día sin alumbrar mi vida,

como las nubes que son empujadas por

vientos levantiscos sin detenerse a mi vera,

como sus palabras hueras, sin sentido,

como lo oscuro del bosque, sin sonidos,

ni emociones,

como el vino que alegra las penas

y llora en las noches.

Así son mis recuerdos junto a ella.

af

14.11.2013.- Nuestro compañero Rafael Torres nos envía el siguiente poema: